APUNTE

Un Messi 'súper'

Araujo celebra el cuarto gol del Barça ante el Getafe.

Araujo celebra el cuarto gol del Barça ante el Getafe. / Jordi Cotrina

Albert Guasch

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Después de escucharle en la radio, se tiene la impresión que Florentino Pérez pretendía imponer la Superliga como su presidencia en el Real Madrid. Con un comunicado, sin esperar oposición, como si fuera inevitable. Nada de una presentación solemne, una rueda de prensa o una explicación detallada del plan. Su perplejidad frente a la contestación delata lo poco acostumbrado que está a que le lleven la contraria. 

Un parto tan defectuoso ha arruinado las perspectivas del proyecto tal y como estaba concebido, lo cual es una buena noticia, aun a pesar de la abundancia de declaraciones, camisetas y tuits populistas de las últimas horas, y aun a pesar de las caras de gozo extasiado de Tebas y Ceferin. Sería aconsejable que la próxima vez que quieran revolucionar la máxima competición de fútbol se lo preparen un poco mejor.

Horario infame

Con la música de funeral por la Superliga de fondo, resultaba apropiado que el visitante al Camp Nou fuera un Getafe, equipo de barrio, que estaba citado sobre el césped a las 22 horas, horario infame, recordatorio de que conviene desconfiar de los que más braman a favor de los aficionados.

A esas horas de toque de queda compareció de nuevo Leo Messi en su permanente estado primaveral. No le importa la hora, la competición o la categoría del rival. Otra noche dulcísima en la que casi se inventa el combo sombrero-sotana sin que el balón toque el suelo. Y en el área contraria. Una virguería incompleta.

Messi mantuvo despierta a la audiencia en la primera parte y el miedo al susto impidió que se cayera dormida en la segunda. Alternó el Barça un fútbol de Superliga con otro propio de los descastados. Mingueza pagó los platos rotos. Se le quedó la cara de un pajarito empapado tras una monumental bronca de Koeman

El gol de Araujo relajó los nervios. Messi hasta renunció al ‘hat trick’ al ceder el penalti a Griezmann, otra noche invisible la suya. ‘Hat trick’ en generosidad. El doblete sigue al alcance de los azulgranas tras la goleada. Un objetivo muy súper. 

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