Ciencia dominada por el coronavirus

La investigación que ha sido realizada en todo el mundo durante el año 2020 ha sido dominada por el covid-19 y el virus Sars-Cov2 que la produce. Unos cálculos aproximados hechos por la revista 'Nature' dicen que durante este año se han publicado unos 200.000 artículos sobre los diferentes aspectos de la pandemia en revistas científicas y depósitos de artículos. El primer artículo, publicado en febrero de 2020 por investigadores chinos, en el que se describe la enfermedad por el primer tiempo ha estado entre los más citados. Seguramente este seguirá siendo el caso durante el año 2021 y es comprensible vista la extensión de la pandemia con más de 84 millones de infectados y aproximándose a los 2 millones de muertes en el mundo y con efectos graves sobre la economía. Cabe preguntarse si la investigación que se ha hecho ha valido la pena, o si, centrados como hemos estado en el covid-19, nos hemos olvidado de otras cuestiones que son bien relevantes para todos nosotros.

Por un lado, en su conjunto la investigación que se ha hecho sobre el covid-19 ha servido para entender el virus y la enfermedad que provoca, para permitir diagnosticar y tratar mejor a quien se había infectado, para ayudar a tomar decisiones para detenerlo y para obtener unas vacunas que son la mayor esperanza para acabar con esta pesadilla. Ha sido un esfuerzo considerable de una ciencia que mayoritariamente ha sido publicada de forma abierta, aunque habrá que ver la calidad real de toda esta investigación. Visto el tiempo récord en que se ha hecho, la información adquirida ha sido muy grande, a pesar de que siguen existiendo incógnitas importantes. Por ejemplo, no sabemos aún con precisión cuál fue el origen del virus, y la actitud de las autoridades chinas estos días poniendo obstáculos a una comisión de encuesta no son un buen presagio. Debemos confirmar también qué efectos tienen las mutaciones que han aparecido en el virus y si las vacunas mantienen su efectividad a largo plazo.

Ante nosotros tenemos retos importantes como los que presentan las cuestiones de medio ambiente o la fragilidad del sistema de producción de alimentos

Ha sido comentado que el foco exclusivo sobre el covid-19 ha dejado de lado otras cuestiones igualmente relevantes para la ciencia y la medicina. Tomada en su conjunto, la pandemia habrá causado un conjunto de muertes considerable, pero las otras causas siguen estando presentes y enfermedades cardiovasculares y tumores siguen siendo las más importantes en nuestro país y las infecciones respiratorias producen en el mundo más de 2,5 millones de muertes anualmente. Probablemente la investigación sobre el covid-19 ha puesto freno a la investigación sobre otras enfermedades bien relevantes. En el año 2020 ha estado lleno de otros resultados científicos que han quedado en segunda página. Solo como ejemplo, pocos han destacado el hito extraordinario que ha sido la nave 'Osiris Rex' de la NASA que, lanzada en 2016, en octubre del 2020 recogió 60 gramos de polvo de la superficie del asteroide Bennu y los transportará a la Tierra, donde llegará el 24 de septiembre de 2023. Y hay en marcha misiones de diferentes países hacia Marte anunciando la visita que algún humano hará tal vez en la década de los años 30.

Pero antes de visitar Marte, quizá tampoco hemos recordado bastante que ante nosotros tenemos retos importantes como los que presentan las cuestiones de medio ambiente o la fragilidad del sistema de producción de alimentos. Este añ,o el uso de plástico habrá aumentado de nuevo y hemos visto que, incluso en nuestro país, hay personas que no pueden acceder a una alimentación suficiente. Los objetivos de mitigar el cambio climático serán siendo tan o más urgentes que nunca, y la reducción de actividad que ha habido en el primer trimestre de 2020 ha tenido poco efecto sobre la composición de la atmósfera. Hay que recordar también que problemas como el aumento de la población y sus efectos sobre las migraciones, la pérdida de biodiversidad o el cambio hacia nuevas fuentes de energía pueden haberse agravado durante el año que acaba de terminar. El esfuerzo que científicos y médicos han hecho durante el 2020 para controlar el covid-19 causado por un virus que no ha dejado de producir sorpresas constantes, era necesario y urgente y ha dado sus frutos. Solo cabe esperar que la experiencia de esta grave emergencia sirva para mantener la confianza en que el trabajo riguroso y constante de mucha gente puede servir para hacer frente a problemas que necesitan de nuestras decisiones.

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