Pandemia es nombre de película

Lo primero que me viene a la cabeza son dos chicos japoneses, cubiertos de arriba a abajo por un uniforme antiradiación paseando por el bosque. Intento recuperar más de esa imagen a través de la memoria y llego con un poco de esfuerzo al momento y al lugar: se trata de Fukushima, es el 2013, y son dos artistas que pasean por la zona de exclusión. Leo que ahora hay un señor que surfea la costa al menos 200 días al año, a unos 30 kilómetros de la central nuclear.

Lo siguiente es 'El almohadón de plumas', el cuento de Horacio Quiroga. En él, una novia convalesciente de una enfermedad se consume, poco a poco, sin que nadie pueda hacer nada, ni siquiera su joven marido, que se desespera, hasta que encuentran la razón: está oculta, por supuesto, en el almohadón de su reposo.

Alguien hace un meme con la película '28 días después' y me llega a través del teléfono móvil. Recordemos: en ella un mono le transmite una enfermedad tremendamente contagiosa a un humano que le convierte en zombi y acaba prácticamente con la población del Reino Unido.oólo algunos resisten aislados en confinamiento mientras se militariza la población.

Por supuesto, hay más. 'La muerte roja' de Edgar Allan Poe, bailando por los salones en los que se han confinado el príncipe y sus súbditos, para huir de esa peste. El rocío rojo, inevitable, que les acaba atacando a todos, y como caen muertos, en su última postura, hasta que el reloj de ébano se para.

También me acuerdo de Harun Farocki, que desarrolló una parte de su inmensa obra a partir de la representación de la naturaleza en 3D. Justo ahora, cuando llegan las imágenes de la Piazza Navona en completo silencio, cuando solo el rumor del agua que cae en la fuente nos llega a través de una 'webcam' instalada en la plaza, recuerdo sus palabras: "El cambio ocurre, no cuando aparece la pantalla para representar la realidad, sino para recrearla a través de la imagen digital".

En estos momentos en los que toda comparación es inexistente, todos nuestros referentes son películas, libros, historias. Todo eso es refugio.