Dos miradas

Qué sonrojo, Ponsatí

La eurodiputada viajó hasta 1492, a la expulsión de los judíos por los Reyes Católicos, para demostrar el ADN siniestro de España. También podemos viajar al Call de Barcelona, a las matanzas de 1391. ¿Cómo nos deja eso a los catalanes?

Comín, Ponsatí y Puigdemont, con sus acreditaciones frente al Parlamento Europeo

Comín, Ponsatí y Puigdemont, con sus acreditaciones frente al Parlamento Europeo / periodico

Emma Riverola

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Clara Ponsatí se estrenó como europarlamentaria con el clásico ‘España, pérfida. Catalunya, víctima’. Para demostrar el ADN siniestro, viajó hasta 1492, a la expulsión de los judíos por parte de los Reyes Católicos. Hecho que, según Ponsatí, inspiró a Hitler y demuestra “la piedra angular del trágico historial español de la intolerancia”.

La historia del pueblo judío es un rosario de persecuciones y matanzas. Como definió el escritor israelí Amos Oz, “el beso de Judas fue el Chernóbil del antisemitismo cristiano”. Cuando los Reyes Católicos dictaron la expulsión, los grandes reinos europeos ya habían acometido las deportaciones. Solo faltaban Austria y Portugal, que pronto siguieron la estela. ¿Hablamos de la Masacre de Lisboa de 1506? ¿De los posteriores pogromos del Imperio ruso? ¿Cuántos países presentes en el Europarlamento pueden arrojar la primera piedra? También podemos viajar al Call de Barcelona, a las matanzas de 1391. Aunque, oh, dios mío, entonces la Corona de Aragón no estaba unida a la de Castilla. ¿Cómo nos deja eso a los catalanes?

Ponsatí fue 'consellera' de Educació durante tres meses del 2017.