Dos miradas

La 'bona gent' de los CDR

Los partidos independentistas han convertido la política en un juego de magia, es más importante gesticular que hacer

Quim Torra, en la sesión del Parlament de este miércoles.

Quim Torra, en la sesión del Parlament de este miércoles. / periodico

Emma Riverola

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El Parlament, gracias a la mayoría independentista, ha exigido el archivo de la causa abierta por la Audiencia Nacional contra los siete CDR investigados por presunta pertenencia a organización terrorista y tenencia de explosivos. También exige su “liberación inmediata”. Es decir, el Parlament anuncia que el poder legislativo ya puede exigir al judicial. ¿Es eso posible? No, evidentemente. Más bien el Parlament vuelve a jugar a confundirlo todo. Para empezar, la propia esencia de la democracia. Los partidos independentistas saben que su exigencia no tendrá ningún recorrido, pero no es gratuita. Han convertido la política en un juego de magia, es más importante gesticular que hacer. Lo malo es que el gesto está cargado de munición.                        

El mensaje transmitido es diáfano: los CDR son buenos (hagan lo que hagan) y la justicia española es mala. A partir de aquí, que cada cual obre en consecuencia. ¡Qué lejos quedan los días del Gobierno de Artur Mas en los que se pedía cárcel para los que cercaron el Parlament! Aunque, bien pensado, es lógico. Aquellos del 15-M no debían de ser ‘bona gent’.