Valores que van a mover el mundo y el dinero

No se trata de un tratado de Filosofía, ni mucho menos. Quien, en esta ocasión, habla de las grandes tendencias que van a mover el mundo en la próxima década es Bank of America, una entidad financiera de ámbito mundial, icono del capitalismo, quen describe los valores que van a marcar la década del 2020. Según el análisis estratégico que BofA Merrill Lynch Global Research ha realizado para sus clientes inversores, en la década del 2020 el foco cambiará de los humanos a los robots; de los hombres, a las mujeres; de la desigualdad, a la redistribución;  del monetarismo, al keynesianismo; de las bajadas de impuestos, a los incrementos y de los bonus de los directivos, al desarrollo de una renta básica universal para toda la población.

Y no es buenismo, lo que hay detrás de este diagnóstico. Sólo es la necesidad de entender el mundo para poder seguir ganando dinero en la nueva década que se abre. Es la necesidad de adaptar el capitalismo a las tendencias que están aporreando sus puertas para evitar que los chalecos amarillos de Francia, los populismos de Europa o la inusitada escalada de revueltas en Latinoamérica acaben derribando sus muros. 

El “resto del mundo”, en lugar de Estados Unidos; los valores, en lugar de la obsesión por el crecimiento; las energías limpias, en lugar de las fósiles; los  ‘stakeholders’ de la empresa (colectivos interesados), en lugar de los accionistas; el proteccionismo, en lugar de la globalización  y, ¡atención!, el “capitalismo moral”, en lugar de “maximizar el beneficio”.

Y no es buenismo; son oportunidades de negocio adaptadas a un mundo cambiante donde los capitalistas tendrán que acertar en su apuestas si quieren seguir dinero.

“Terminaremos la década con casi mil millones de personas agregadas al mundo, una población que envejece rápidamente, hasta 800 millones de personas que enfrentan la amenaza de la automatización del trabajo y el medio ambiente al borde de un cambio catastrófico”, describe el banco americano.

Y no es buenismo, cuando los empresarios de Foment del Treball presenta un informe para avanzar en un “nuevo pacto social” que incluye nuevas subidas del salario mínimo interprofesional o que la Administración empiece a estudiar como implementar una renta básica que permita unos "salarios suficientes”. Son solo recetas para garantizar la paz social que necesita el buen desarrollo de los negocios.

Ni es buenismo, cuando el Fondo Monetario Internacional (FMI) habla de ‘capitalismo inclusivo’.

Pero, por una vez, las tendencias que -según los gurús capitalistas- van a mover el mundo en la próxima década aproximan los intereses de quienes quieren ganar más dinero y de quienes exigen que se distribuya mejor. Y eso no es sino la base para el nuevo pacto social que requiere la nueva década. El economista Antón Costas lleva años pidiéndolo. Y no es buenismo.