Aprendizaje

La primera vez

Me encuentro en un lugar fantástico, en el que constantemente aprendes. Solo por eso ya tengo ganas de empezar el lunes 'Planta Baixa'

Un tren de Rodalies circulando por la costa

Un tren de Rodalies circulando por la costa

Ricard Ustrell

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El otro día me quedé atrapado mirando un vídeo que mi amigo y periodista Jordi Call colgó en Twitter. Se trataba de una niña viendo un tren en marcha por primera vez en su vida. Su cara lo daba todo: ilusión, expectativa, miedo y satisfacción. Me emocioné. Tenía todo lo imprescindible de la vida.

Hace tiempo leí un fantástico libro del periodista Marc Serena y el fotógrafo Edu Bayer titulado 'Microcatalunya, un viatge per 50 micropobles'. Pasaron siete meses en una furgoneta visitando municipios de menos de 500 habitantes. En una de las muchas historias que contaban estaba la de una mujer que nunca había visto el mar y no tenía intención de verlo. Me chocó. ¿Cómo alguién renuncia en su vida a ver el mar? ¿Con qué rotundidad uno puede prescindir de conocer algo nuevo? Había un poco de comodidad, la inecesaria necesidad, pero sobre todo lo que más me enamoró de ella: sus principios estoicos, algo que siempre merece ser respetado y más de alguien con experiencia en la vida. Su reiterada negativa en ver el mar representaba la fortaleza de sus convicciones.

Ahora me encuentro en ese 'impasse'. El lunes 16 empiezo 'Planta Baixa', un ilusionante nuevo programa de actualidad social y política en los mediodías en TV-3. Me acompañará gente con experiencia como Carles Francino, Marina Garcés, Lola García o Antoni Bassas. Y al lado, un equipazo, una nueva generación de periodistas que estará por todo el territorio, donde se encuentran los periodistas Egdar Sapiña y Bea Duodu, recién salidos de la universidad - con 22 años- y un talento brutal. Y ahí está la clave. Me encuentro en un lugar fantástico. En el que constantemente aprendes. A veces de la experiencia de Garcés y a veces del atrevimiento de Duodu. También para mí es como ver un tren por primera vez. Lo hemos imaginado muchas veces y ahora vamos a verlo entrar. Solo por eso ya tengo ganas de empezar el lunes. Y el martes volver: con la ilusión, la expectativa, el miedo y la satisfacción. Mi forma de ver y aprender.