Más indicadores de incertidumbre económica

Que el paro suba en agosto, cuando acaba la temporada turística, es previsible. Pero que el de este año sea el peor dato del paro registrado en un mes de agosto desde el 2010 es motivo de preocupación. Sobre todo si se suman otros indicadores poco alentadores, en medio de un clima de inquietud por la guerra comercial entre Estados Unidos y China. En concreto, agosto acabó con 54.371 personas más apuntadas a las listas del paro en España, 12.588 más en Catalunya. Septiembre será clave para confirmar si vuelve la contratación o, por el contrario, se acentúa la tendencia a la baja.

También agosto fue un mal mes en cuanto a ventas de coches. Las matriculaciones de turismos y todoterrenos cayeron el 30,8% interanual, caída cuya causa principal fue la normativa de emisiones que entró en vigor el pasado septiembre, aunque pueda ser también un indicio de retracción del consumo. Aún hay otro dato preocupante: el índice PMI industrial, una encuesta a responsables de compras de las empresas, se situó por tercer mes consecutivo por debajo de los 50 puntos que marcan la diferencia entre contracción o expansión de la actividad. España no es un caso aislado: el conjunto de la eurozona, especialmente Alemania, se resiente de la incertidumbre global. Sin embargo, a nivel interno no ayuda que el Gobierno lleve cuatro meses en funciones, lo que retrasa la toma de todo tipo de decisiones. Afrontar la incertidumbre económica precisa un marco de estabilidad política.