Los detalles

Todo el mundo sabe que Dios habita en los detalles, que es más o menos lo que dijo Mies van der Rohe para explicar su estética. También lo hizo notar Stendhal: "es lo más importante en una novela". Aportan, tanto en arquitectura como en literatura, en cualquiera de las artes, no solo una información necesaria para construir un mundo, sino la posibilidad de elevar la creación más allá, justamente, de los detalles que la conforman. No podemos hablar de nada si no hablamos de todo. Y no podemos pensar en un todo si abandonamos la concreción de los detalles, que no son mera acumulación sino marco donde encaja la historia.

Cuando contemplamos, atónitos, los vídeos que la fiscalía presentó en el juicio del 'procés'vídeos juicio del 'procés', pensé en esta máxima poética. Y concluí que había dos posibilidades. O bien eran juristas ineptos -porque menospreciaban el detalle, en una presentación caótica- o bien ejecutaban una estrategia milimetrada, en la que no contaba la precisión sino el planteamiento vago de la existencia del "clima insurreccional" y la "violencia ambiental ". Y por eso eran torpes, a conciencia,torpes porque entendían que el caos se explica con caos. Y que no cuentan los detalles, como en arquitectura o literatura, sino el magma deformado. En una clase de estética, habrían suspendido. En una de ética, probablemente también. Obsesionados con la violencia del artículo 472, dañan la realidad a base de esconder los detalles de ese día.