Este muerto está muy vivo

'Pete Doherty & The Puta Madres' es un disco que demuestra que el ex-Libertines ha vuelto en plena forma

zentauroepp33755823 gra470  barcelona  03 05 2016   el m sico brit nico pete doh190507163627

zentauroepp33755823 gra470 barcelona 03 05 2016 el m sico brit nico pete doh190507163627 / periodico

Ramón de España

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Peter Doherty, dipsómano extraordinario y politoxicómano ejemplar, ha conseguido llegar vivo a los cuarenta años, cosa que tiene mucho mérito porque el muchacho es de esos que si no los atropella un taxi saliendo del pub -como le sucedió hace años a su maestro de mala vida Shane McGowan-, es capaz de arrojarse él solo al paso de un autobús. O de cortarse un dedo con unas tijeras cuando solo pretendía quitarle la etiqueta a una chaqueta recién comprada. O lo que a ustedes se les ocurra, pues las andanzas etílicas del señor Doherty han sido muchas y variadas. De hecho, a base de salir siempre en la prensa por motivos extramusicales, hay gente que no ha reparado en que es un muy buen cantante y un notable compositor. Lo demostró en sus discos con The Libertines y Babyshambles. Lo confirmó con su primer álbum en solitario, 'Grace/Wastelands', lleno de baladas preciosas que indicaban la existencia de un ser sensible pugnando por salir de dentro de ese borracho con el pelo pringoso, las uñas sucias y los dedos amarillentos de nicotina. ¿Llevó a Kate Moss por el mal camino cuando estaban juntos? Me temo que la señorita Moss se pintaba sola para enfilar sin ayuda ese mal camino, aunque ahora la han puesto a secar (de ahí la cara de aburrimiento que pone en las fotos).

El nuevo disco del bueno de Pete, recién aparecido, se titula 'Peter Doherty & The Puta Madres' (el batería, Rafa Rueda, es español). Menos lírico que 'Grace/Wastelands', pero también menos ruidoso que los discos de The Libertines –que eran como unos Kinks pasados de anfetaminas-, la nueva obra del señor Doherty nos lo muestra en plena forma como letrista, compositor y cantante. Abundan los medios tiempos y no faltan las baladas. La inclusión en el grupo de un violinista que le da al arco como si le estuviese rajando el cuello a alguien otorga a las canciones un tono de folk acelerado a lo Pogues que resulta muy estimulante. Todo el disco es muy adecuado para esas mañanas que te has levantado un poco fofo, física y mentalmente, y necesitas una (leve) sacudida.

Y lo más importante -por lo menos, para mí- es que Peter Doherty & The Puta Madres es un disco que se inserta en una tradición, la que se remonta a los Kinks y a los Stones y a la era dorada del pop británico y que, en la época de las divas y el hip hop, lleva camino de convertirse en una rareza.