Dos miradas

Fútbol y fascismo

La reacción en Italia cuando seguidores de la Lazio utilizaron la imagen de Anna Frank fue ejemplar. Aquí no estoy seguro de que pase

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Josep Maria Fonalleras

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En un partido de la pasada temporada, algunos aficionados de la Lazio engancharon a las paredes del Olimpico de Roma unos rótulos adhesivos en los que se veía la imagen de Anna Frank vestida con una sudadera de la Roma, el equipo rival. El mensaje era evidente, con unas innegables connotaciones fascistas y racistas, y con la utilización mezquina de un símbolo de la lucha contra el nazismo. La reacción en contra fue fulminante y, para tratar de hacerse perdonar, la directiva de la Lazio hizo salir a los jugadores, el día del siguiente partido, con una camiseta en la que había un mensaje contra el antisemitismo. En Italia se guardó un minuto de silencio en todos los campos y los jugadores de todos los equipos de la Serie A leyeron fragmentos del icónico dietario de la joven judía. Meses después, la federación multó a la Lazio con 50.000 euros por tener unos aficionados como aquellos.

Aquí debería ocurrir lo mismo, pero no estoy seguro que pase. Después de que el delegado del equipo insultara a un aficionado de Jovent Gironí ('¡calla, negro de mierda!'), unos ultras del Espanyol engancharon, en el campo del Girona, fotos de Anna Frank con la camiseta del Barça. ¿Saldrá el Espanyol, orgulloso de su afición, en contra de estos energúmenos? ¿Será multado por la federación? ¿Se restablecerá la dignidad con una lectura compartida? ¿Es un asunto menor, pueden decir algunos? El fascismo se extiende por todas partes y hay que combatirlo siempre, sin dilaciones.


Este artículo se ha publicado este martes en la web de EL PERIODICO y poco después el Espanyol emitía un comunicado de condena. Una buena noticia. No se trata de un asunto menor y es bueno que el club haya tomado esta decisión. Quizás llega un poco tarde, pero llega.