Bienvenido, Mr. Gunn

 El rock, el folk, el pop y sus diferentes mezclas no parecen ocupar hoy en día el lugar relevante del que disfrutaron en el pasado: basta con echar un vistazo a los últimos ganadores de los Grammy para comprobar cómo se imponen las divas, el hip hop y cualquier cosa que no tenga nada que ver con el viejo y querido rock & roll. Que el pop contemporáneo lo representen grupos más bien fofos, como los Arctic Monkeys o Franz Ferdinand, y que el folk esté en manos del cursi de Ed Sheeran resulta muy triste para los rockeros de una cierta edad, colectivo al que pertenezco. De ahí la alegría ante la publicación de 'The unseen in between', el nuevo disco del norteamericano Steve Gunn, que ya lleva unos cuantos a cuestas que no funcionaron muy bien y le obligaron a ganarse la vida como guitarrista en la banda de su amigo Kurt Vile.

La mezcla de pop, folk y rock del señor Gunn resulta especialmente estimulante en su última entrega gracias a canciones como 'New moon' o 'Morning is mended', hermosas e intemporales, que tanto podrían haber sido grabadas a finales de los años 60 como ahora mismo. Puede que su voz no sea como la de Nick Drake, pero también te llega al alma. Y su uso de las guitarras -eléctrica y acústica- define su sonido, clásico y nuevo al mismo tiempo. 'The unseen in between' no es de esos discos que te entran a la primera escucha, que solo sirve para generar una curiosidad que te lleva a repetir la experiencia prácticamente a diario, hasta que llegas a la conclusión de que es de lo mejor que has oído últimamente.

Respetuoso con sus mayores, el señor Gunn ha tenido también el detalle de producir el último disco del venerable Michael Chapman, contribuyendo también con su voz, sus guitarras y algunas fotos de la carpeta, así como fichando para hacer coros a la tan legendaria como olvidada Bridget St. John. A sus 78 años, este músico inglés con más de cuarenta discos a la espalda y una curiosidad que le ha llevado a practicar el folk, el rock, el blues y hasta la música tradicional norteamericana, ha conseguido con este 'True North' una joyita intemporal que la producción de Gunn -en la línea de las de Rick Rubin para los 'American Recordings' de Johnny Cash- ha envuelto de manera austera con voces, guitarras e instrumentos de cuerda. Si no fuera por estos ratos…