Violencia sexual

Campeones en hipocresía

Quedamos muy modernos enviando una película sobre discapacitados a los Oscar, pero somos un país bananero con una justicia patriarcal que no reconoce los derechos de las mujeres

Manifestación del Día Internacional de la Mujer en Barcelona.

Manifestación del Día Internacional de la Mujer en Barcelona. / periodico

Lucía Etxebarria

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Hace tres meses, la Audiencia de Lleida condenó a cuatro años y seis meses de prisión a dos hombres que violaron en agosto del año pasado a una joven en Vielha.

La Audiencia da total veracidad a la víctima y considera probado que acabó siendo violada. El tribunal sostiene que su declaración fue "totalmente creíble". Su testimonio, subraya, "denota una inquebrantable persistencia y ausencia de contradicciones tanto en cuanto a su negativa a mantener relaciones sexuales con los acusados, como en la imputación de los hechos". 

Pero la Justicia ha entendido que ella "no se opuso con la suficiente contundencia", así que les ha asignado a sus agresores la pena mínima por abusos sexuales. Es decir, en la misma sentencia se reconoce que la joven ha sido violada pero a la vez no se condena por violación a los culpables. ¿Perdona?

Es lo de siempre: si no se defiende y pone en peligro su vida, es que quería sexo. Con dos hombres, uno tras otro. Y quería que, además, un tercero ( que ha quedado libre) tomara fotos.

Más de la mitad de las mujeres con discapacidad intelectual sufre o ha sufrido algún tipo de violencia sexual, según señala el Consejo de Europa. Pocas se atreven a denunciar, porque saben que esto es lo que puede suceder. Que no las crean. Pero, además,  si la chica hubiera quedado embarazada, el señor Casado cree que no la habríamos debido permitir abortar. Que esa criatura hubiera debido venir al mundo a pagarnos las pensiones.

Sí, quedamos muy modernos enviando 'Campeones', una película sobre discapacitados, a los Oscar, dándole un Goya a un actor con discapacidad y elogiando su discurso. Pero somos un país bananero con una justicia patriarcal que no reconoce los derechos de las mujeres, mucho menos los de las mujeres discapacitadas.

El año pasado las feministas paramos las calles de Madrid con 200.000 personas. El domingo pasado Vox, PP y Ciudadanos no sumaron 50.000. Nos sobran motivos para llenar de nuevo las calles el próximo 8 de marzo. Somos más y podemos cambiar las cosas.