Desde detrás

Lunes, 12 de noviembre, se anuncia a Manuel MarchenaManuel Marchena como nuevo presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Supremo. Su nombre se difunde antes del nombramiento de los 20 vocales que, en teoría, deberían elegirlo. El pacto PSOE y PP es diáfano. No es nuevo, pero siempre es vergonzoso.

Lunes, 19 de noviembre, se filtra una conversación de WhatsApp de Ignacio CosidóIgnacio Cosidó, portavoz del PP en el Senado, presumiendo entre sus compañeros del control que los populares tendrán sobre el Supremo y su “sala segunda desde atrás” (la que juzgará a los líderes independentistas).

Martes, 20, Marchena anuncia en una contundente carta su renuncia a la presidencia en aras de defender su independencia. El PP rompe el pacto de renovación del CGPJ. Exige la dimisión de la ministra Dolores Delgado para reemprenderlo.

No nos engañemos, son las formas las que han hecho renunciar a Marchena. Ese WhatsApp transparente, palmario, de Cosidó. El juez no tenía elección. O quedaba como un peón al servicio del PP o renunciaba. En cambio, al PP nunca se le suben los colores. Ahí está, exigiendo dimisiones después de desnudar las vergüenzas de la justicia española. “Desde detrás” no va a arreglarse. Al contrario, solo aumenta el descrédito y la opacidad. Preocupante situación para los líderes independentistas acusados. Marchena permanecerá en la sala segunda. ¿Qué hará el PP? ¿Controlará el juicio desde delante?