Pedrolo, maestro de la tenacidad

Celebro mucho que la revista 'Capçalera', del Col.legi de Periodistes de Catalunya, haya dedicado unas páginas al escritor Manuel de Pedrolo.Manuel de Pedrolo Se celebra el centenario de su nacimiento y, como escritor, fue una figura catalana muy importante en tiempos difíciles, en la posguerra.

Yo lo visité alguna vez en su pequeño despacho. En aquellos años de la posguerra, pero de combate político y cultural, Pedrolo fue una de las rocas más consistentes. Pero una roca activa. De su pequeño y atestado escritorio salían textos y más textos, siempre con voluntad de compromiso.

Si se me permite la expresión, era un intelectual de batalla. Su hija Adelais -a quien saludo con respeto- recuerda que su padre era muy crítico con todo el mundo, pero tengo que decir que, en mi opinión, nunca lo fue por envidia, sino por exigencia.

Escribió muchísimo, y me permito una pequeña broma-verdad, para que la censura no tuviera tiempo suficiente de censurarle todo lo que escribía.

Laura Saula ha dedicado una meritoria información sobre Pedrolo. Y estará muy bien porque podremos darnos cuenta de la importancia de un escritor que no quedó fácilmente enmarcado en su época. Anna Maria Villalonga habla de la relación de la obra de Pedrolo con la poesía, el teatro, los cuentos, las novelas, los dietarios...

Visto desde la perspectiva actual, se podría pensar que Pedrolo quería llenar en su época todas las formas culturales que, en aquellos tiempos difíciles, estaban obstruidas. En fin, simplifiquemos: Manuel de Pedrolo, bienvenido a casa.