Ideas

'Made in BCN' de baja

zentauroepp25441999 barcelona 21 03 2014 lugares que se pueden visitar gratis en180827165609

zentauroepp25441999 barcelona 21 03 2014 lugares que se pueden visitar gratis en180827165609 / .25441999

Xavier Bru de Sala

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Cuando se trata de contraponer lo que surge de Barcelona con lo que sucede en Barcelona, gana siempre lo que aquí sucede. Estamos consolidados como escenario preferente de los artistas en gira. El talento propio, en cambio, a la cola, sin posibilidades de desarrollarse en condiciones suficientes. Convertirse en un referente internacional en materia de turismo de festivales se hizo viable gracias a una serie de complicidades público-privadas. Barcelona es una cantera excepcional de promotores de primera, tan buenos que en algunos casos supieron llamar a las puertas convenientes para obtener el apoyo que deseaban. En otros, también se han sabido espabilar con soportes menguantes o contra competidores más fuertes que pretendían eliminarlos del mapa.

Sin una sacudida o nuevos centros que estimulen la creación, proseguirá el declive 

A la vista de los déficits en el apoyo a la creación, algunos de los festivales de referencia dedican espacios a los emergentes, que en realidad son guetos de los que no emergerán. También en teatro, pero sobre todo en música, que un creador se convierta en especie protegida es una forma de supervivencia, de mínimos, a cambio de llevar las alas recortadas dentro de jaulas sin ascensor.

De ahí que el desequilibrio de la balanza importar-exportar se agrave cada vez más. Para ayudar a quienes triunfan a base de importar talento basta con un gestor funcionarizado. Para apoyar el talento propio y abrirle puertas de internacionalización se necesitan diseñadores de micropolíticas culturales de la máxima ambición y con libertad de acción. Las administraciones se nos han vuelto raquíticas y han perdido la capacidad de iniciativa que las mantenía, a pesar de todo, como competitivas.

Las fábricas de creación, lejos del tsunami cultural que deberían haber propiciado, se conforman con ir tirando. Sin una buena sacudida, sin nuevos centros que estimulen la creación transnacional en red, proseguirá el declive de Barcelona como centro de arte y cultura innovador capaz de irradiar.