Análisis

La problemática de los 'perros mendigo'

Si existe voluntad por parte del Ayuntamiento, puede frenarse la explotación en las calles de animales inocentes

Dos de los individuos que utilizan a perros como reclamo lucrativo, con dos cachorros braco de weimar y un bichón maltés en paseo de Gracia con Gran Via de les Corts Catalanes.

Dos de los individuos que utilizan a perros como reclamo lucrativo, con dos cachorros braco de weimar y un bichón maltés en paseo de Gracia con Gran Via de les Corts Catalanes. / ADRIANA DOMÍNGUEZ

Carles Soliva

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Se hace referencia con los 'perros mendigos' a los que son utilizados para despertar la simpatía de la gente y obtener un beneficio económico. Son exhibidos sin pudor junto a una persona que pide dinero a los transeúntes. Por tanto, quedan excluidos de estas reflexiones los perros que sirven de único soporte afectivo y emocional a quienes se han visto marginados en la vida y viven en la calle. El pasado mes de junio, unos indeseables propinaron una paliza a un indigente en la plaza de Catalunya dejándole malherido: acudió la asistencia sanitaria y no quiso ser trasladado sin sus dos perros: Marte y Thor. Los perros recibían el cuidado veterinario de la Fundación Altarriba que realiza esta encomiable labor desde hace más de tres años con unos 65 canes de sintecho y se hizo cargo de los mismos. Pero el vínculo era tan fuerte que se resistió a separarse de sus amigos pese a que le acabó costando la vida.

Así, con exposición de perros de origen no acreditado (camiones cargados de inocentes animales, muchos enfermos, provenientes del Este, se suministran a empresas que dicen tener criadero: la última el mes de julio en Vinaròs, en la que se falsificaban documentaciones y pedigrís; anteriormente en Girona) en condiciones frecuentemente de maltrato animal provocan la compasión para que se les dé una limosna. Ante estos hechos, ¿cómo actúa la Administración? La competencia municipal, a través de la Oficina de Protecció dels Animals (OPAB), sorprendentemente no tiene línea directa con la Guardia Urbana. Se tarda unos dos meses en decomisar un perro que sufra estas condiciones, y ello si se procede a hacerlo. Son hechos públicos y notorios conocidos por el Ayuntamiento que permanece pasivo ante esta situación.

Hay dos cuestiones trascendentes:

1.- Los perros siempre deben estar identificados con chip.

2.- La documentación del animal solo puede obtenerse a través de un núcleo zoológico: es decir, criador legal o adopción.

Es evidente que si se produce una actuación y se niega la documentación del can (que puede estar sometido a malos tratos que pudieran ser constitutivos de delito y objeto de denuncia) debería comprobarse cuando se aporte la fecha del chip. Si es de ese mismo día parece obvio el presunto fraude. Y si siempre es el mismo veterinario, debería iniciarse una actuación por parte de la autoridad municipal.

La solución a este problema la tiene el Ayuntamiento. El pasado mes de julio se intervinieron 38 animales enfermos y 30 muertos en una tienda de Barcelona. Todas las cartillas y documentación de los animales provenían de Eslovaquía. Se les prohibió la venta. Actuación de la Guardia Urbana. Por tanto, si existe voluntad, sí pueden adoptarse soluciones para evitar la explotación (que es de lo que se trata) de los inocentes animales, cuyo origen y destino es, por otra parte, desconocido.

Recordando al indigente que falleció evoco palabras de Milan Kundera. "El amor entre un ser humano y un perro es un idilio. En él no hay conflictos, no hay escenas desgarradoras…". Desgraciadamente, algunas personas son insensibles a ese amor.

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