IDEAS

NWR, prescriptor en línea

Nicolas Winding Refn y Elle Fanning, en una imagen promocional de 'The neon demon'

Nicolas Winding Refn y Elle Fanning, en una imagen promocional de 'The neon demon'

Desirée de Fez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Nicolas Winding Refn, director de Drive (2011) o The neon demon (2016), publicó el miércoles en The Guardian un artículo estupendo en el que dice muchas cosas interesantes. Habla, por ejemplo, de la América de Trump y de la necesidad (más que nunca) de "un arte bueno y desafiante" para afrontar una realidad compleja: "No del arte del buen gusto, que es el enemigo de la creatividad". Y habla, sobre todo, del poder de las películas que no encajan en ese cine del buen gusto, adocenado y mercantilizado.

No inventa la sopa de ajo, pero es sabio y directo al exponer sus argumentos. Y hace una cosa que echo de menos en las declaraciones de cineastas: mostrarse conectado con la realidad y recordar la necesidad, siempre a favor del arte, de sacudirse y buscar nuevos derroteros creativos, por chiflados que resulten.

Este mes verá la luz por fin byNWR.com, la plataforma de 'streaming' que Nicolas Winding Refn ha concebido para exhibir películas raras o poco conocidas

De todo lo que cuenta, lo que más me gusta tiene que ver con lo último. Según The Guardian, este mes verá por fin la luz byNWR.com, la plataforma de streaming (en teoría gratuita) que el cineasta ha concebido para exhibir películas raras o poco conocidas, entre ellas Marea nocturna (1961) de Curtis Harrington y The nest of the cuckoo birds (Bert Williams, 1965), cuya restauración en 4K (desconozco si de todas) ha financiado él mismo.

No hay mucha información al respecto, y es todo tan idílico que cuesta creer que sea cierto. Hasta que no lo vea no acabaré de creérmelo. Pero, incluso si esa fantasía no llega a concretarse (o nosotros desde aquí no tenemos acceso, algo que podría pasar) encierra cosas que me entusiasman. Abre nuevos caminos en la exhibición en línea (NWR presentó el proyecto el año pasado en el festival Lumière de Lyón y, por ejemplo, su idea de los contenidos adicionales era una gozada), corrobora algo tan obvio como que las proyecciones de calidad no son exclusivas de una sala de cine y, esto último me fascina, hace que el cine de culto entre en una nueva dimensión. Si los mecanismos para acceder a esas películas han cambiado totalmente los últimos años, NWR da varios pasos más al rescatarlas, restaurarlas, compartirlas y consagrarse como intachable prescriptor en línea.

TEMAS