La pantalla de un móvil causa un tsunami

Eran las nueve y seis minutos de la mañana y le decía Inés Arrimadas a <b>Ana Rosa Quintana</b> respecto del procés y de la deriva de los independentistas catalanes (T-5): «¡Ahora ya veo un poco de luz!». Y Ana Rosa, pletórica, le contestaba: «Pues cuando veas la exclusiva que vamos a ofrecer en nuestro programa, ¡vas a ver un sol radiante!». ¡Ahh! Siendo una noticia interesante, hasta importante, había un plus de emoción sobrevenida en el momento de narrarla. Ana Rosa parecía levitar, aunque hacía esfuerzos por refrenarse. Decía: «¡Este es el cogote de Comín, y nuestro cámara está detrás! ¡Y estos son los mensajes en su teléfono móvil! (..) Con nuestra exclusiva ¡el procés ha muerto! (..) ¡Puigdemont ha tirado la toalla!», y mientras insertaban un rótulo que anunciaba: «Exclusiva: Puigdemont confiesa sus verdaderas intenciones», una voz en off del programa recalcaba: «¡Puigdemont se rinde!». Y el clima en Tele 5 era de una felicidad periodística trepidante y extraordinaria. El reportero de Ana Rosa que cubrió el acto, Luis Navarro, junto al cámara que enfocó la pantalla, Fernando Hernández, entró en directo y detalló la hazaña: «Comín leía los mensajes y estaba desencajado. No se atrevía a responder. Acabó escondiendose en el backstage. La red que usaban para los mensajes era SIGNAL, que es la misma que usa Edward Snowden para comunicarse». ¡Ahh! Ha sido la mañana de Ana Rosa, eso es incuestionable. Los golpes de pantalla del móvil de Toni Comín en Lovaina -que los tienen ustedes perfectamente reflejados en la sección de actualidad política de este diario- retumbaron por todo el telehipódromo estatal. En el TN migdia (TV-3) abrieron con el tema, aunque se esforzaron por lanzar un mensaje de tranquilidad, seguramente dirigido a la parte de la parroquia que pueda sentirse alarmada, insertando un rótulo que decía: «Puigdemont se sent sacrificat però continua», seguido de la alocución: «Puigdemont hay momentos en que duda, ¡pero no se echará para atrás!». También resaltaron con énfasis que <b>Comín</b> emprenderá acciones legales, «porque se ha desvelado una conversación privada».

¡Ah! El posible o imposible derecho a la privacidad -en local público, conviene recordarlo-, seguramente tendrá en TV-3 un amplio recorrido. Me temo que más que la esencia de lo que dicen los mensajes.