Europa y la desmemoria
Los restos del día
Aconseja Ishiguro que deberíamos aguzar el oído y encontrar otra gran visión humanista alrededor de la cual congregarnos

Kazuo Isiguro / Neil Hall / Efe

Olga Merino
Olga MerinoPeriodista y escritora
Escritora y periodista. Master of Arts (Latin American Studies) por la University College of London (Beca La Caixa/British Council). Fue corresponsal de EL PERIÓDICO en Moscú en los años 90. Profesora en la Escola d'Escriptura de l'Ateneu Barcelonès. Su última novela: 'La forastera' (Alfaguara, 2020).
OLGA MERINO
Hace frío, y los días invitan más que nunca a quedarse en casa leyendo. Busco en la estantería 'Los restos del día', y al hojear el libro afloran viejas frases subrayadas, como las que escribe la antigua ama de llaves en una carta a mister Stevens, el mayordomo protagonista de la novela: «Aunque no tengo la menor idea de qué utilidad puedo darle a lo que me queda de vida […] solo veo el resto de mis días como un gran vacío que se extiende ante mí». Un tándem espectacular en el texto y también en la pantalla: ya es imposible despegar a Anthony Hopkins de la piel del mayordomo cuyo amo simpatizaba con los nazis.
'Los restos del día' es tal vez la mejor obra de Kazuo IshiguroKazuo Ishiguro. Hoy recibe el Nobel de Literatura tras haber leído el jueves, en la Academia Sueca, un discurso de aceptación donde vertió las soledades y las influencias que le convirtieron en escritor, desde Proust hasta las canciones de Tom Waits. Pero no es tanto eso, la escritura y su cocina, lo memorable de la alocución, como su mirada inteligente sobre el mundo desde el fin de la segunda guerra mundial. Si la generación de nuestros padres, la de la posguerra, fue capaz de reconstruir Europa desde las cenizas y convertirla en un espacio de democracia casi sin fronteras, los años transcurridos desde la caída del Muro de Berlín se han evaporado en la autocomplacencia. Un tiempo de oportunidades perdidas. Ha crecido la brecha de la desigualdad desde entonces. Las políticas de austeridad han enseñado la patita de sus verdaderas intenciones. Medran el racismo, la ultraderecha y el nacionalismo tribal. Y los países ricos compiten a cara de perro por los recursos.
Haber malgastado la vida
Aconseja Ishiguro que deberíamos aguzar el oído y encontrar otra gran visión humanista alrededor de la cual congregarnos. De no modificar el rumbo, corremos el riesgo de que nos ocurra como al mayordomo de la novela: paladear la amarga sensación, al final de la vida, de haberla malgastado por no asumir responsabilidades. Y con lo que queda del día pulverizado entre las manos.
- El despacho de Los Morancos 'va como un tiro': cancela más de 14 millones en deudas a 217 familias
- La UCO concluye que el director de Carreteras adjudicó 264,5 millones a empresas de la trama de Cerdán a petición de Koldo
- Fernando Sánchez, experto en finanzas personales: 'A mis sobrinos no les regalo juguetes, pero cada mes les hago una aportación a una cartera de acciones y a un pequeño ETF
- Libres de Deuda: así funciona la empresa de Los Morancos que ayuda a liberar las cargas económicas de la gente
- La madre de Michu rompe su silencio y habla por primera vez del auténtico motivo de su muerte
- Llega de noche a Barcelona la esperada rueda gigante de la tuneladora que excava la L9 del metro
- La venta a peso de 'cajas sorpresa' de Amazon llega al centro de Barcelona: 'Es como una lotería
- Catalunya, en alerta por fuertes lluvias: estas son las zonas donde más puede llover