tú y yo somos tres

Alta gastronomía: suflé con cuchillos

ferran Monegal

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Para celebrar la nueva temporada de '<i>Top chef', </i>el Gran Wyoming se ha sumado al frenesí gastronómico de A-3 TV y desde su hermana pequeña, La Sexta, nos ha filtrado la receta de un plato muy de moda que ha intitulado el suflé catalán. Pidió que tomásemos nota de los ingredientes. Decía: «Se coge un estatuto frustrado, se le añade un puñado de sentimiento independentista, también una cucharada de un partido dispuesto a cualquier cosa para tapar sus vergüenzas, se agrega una buena dosis de judicialización y 200 gramos de inmovilismo, se retira la capa de diálogo, y se salpimienta todo con Coca-Cola». Y para ilustrar la bondad de este mejunje, sacó a Rajoy y a Mas en plan cocineros de alta gastronomía. Hombre, la receta de este suflé arriesga poquísimo. Es un ejercicio equilibrista entre el independentismo catalán y el inmovilismo del Gobierno de Madrid. La elección de uno de los cocineros también es discutible. Quizá en lugar de Mas deberían haber puesto a Junqueras, político que, según acreditados tertulianos analistas, es quien está cocinando de verdad el suflé. Precisamente el otro día el estimado colega Lluís Foix advertía en '8 al día' (8TV) que al igual que en el 2014 hubo delicadas conversaciones tripartitas -EL PERIÓDICO lo contó en exclusiva- entre Rigol (CiU), Arriola (PP) y Serrano (PSOE), ahora también se están produciendo apasionantes «tocamientos por debajo de la mesa». O sea, que debajo de la tabla del obrador del suflé puede que haya ahora mismo un gran frenesí. Hay dudas de si se tocan con dulzura o si se pinchan con los cuchillos.

En 'Top chef' también hemos visto al jurado (Chicote, Susi Díaz y Paco Roncero) pasearse con los cuchillos por entre los aspirantes. En este concurso conseguir los cuchillos es fundamental. Igual que en política. Los participantes son profesionales, con mucha trayectoria a sus espaldas. Hay incluso un cocinero -Victor, de Salamanca- que tiene una estrella Michelin. En casa ya tenemos un favorito: Richard Alcayde, de La pesquera, de Málaga. Es un chef al clásico estilo: mucha sabiduría y 120 kilos de peso. Es reconfortante encontrarte un cocinero con mucha humanidad. Eso lo sabe muy bien el gran Paul Bocuse. Hay otro aspirante interesante: el alicantino Pablo Montoro. Es el chef privado de un multimillonario ruso. Decía: «Cocino para la pareja y para su perrito. Nunca he repetido un plato». Colosal vida gastronómica, la del perrito.