México, Catalunya... y un nuevo país
Xavier Ginesta
Periodista y profesor de la Universitat de Vic
XAVIER GINESTA
Este 9-N no he podido ir a votar. Lo haré cuando vuelva de Monterrey, donde he tenido que viajar a causa de mi trabajo. Sin embargo, la globalización permite hoy en día que desde la otra punta de mundo se pueda seguir la actualidad de tu tierra con facilidad. Mientras comía un plato de frijoles en la Macro Plaza de la ciudad, frente al Museo de Historia Mexicana y en uno de los extremos del canal de Santa Lucía, podía disfrutar leyendo por Internet y las redes sociales el éxito de participación que alcanzaba la consulta. Después de once horas de avión, más cerca que nunca de la actualidad catalana.
La ciudad de Monterrey vive ligada al mestizaje de la frontera, que tan bien radiografía otro de los grandes museos que tiene: el Museo del Noreste (MUNE). Es una ciudad mexicana con acento tejano, como se pone de manifiesto cotidianamente por la vestimenta de algunos de sus vecinos que lucen elegantes sombreros de cowboy o las relaciones comerciales constantes –aunque no simétricas– entre los dos territorios, Texas y Nuevo León.
Pero, lo cierto es que Monterrey no olvida el pasado colonial ni la represión que la población indígena sufrió bajo el virreinato español. Quizás, mi humilde homenaje a quienes en Cataluya han hecho del 9-N un éxito sin precedentes ha sido pasear unas horas por ambos museos, estudiando cómo los mexicanos cuentan su propia versión de la historia. Seguramente, mucho más cierta que la que durante tantos años ha vendido el Estado español y se ha transmitido de padres a hijos. Reza un cartel de una de las exposiciones: "La colonización española no sólo fue política, sino también religiosa".
Estandarte de Hernán Cortés junto al cuadro-mural de 'La Conquista' de Federico Cantó. Preside una de las salas del Museo de Historia Mexicana dedicada al imperio español. Una mujer de facciones indias, bajita y de formas voluminosas, explica a su hija que no debe tener más de 5 años qué significa todo aquello: "Esto es la conquista, y no está bien. [Los españoles] querían que todos fueran iguales". Una manera fácil de entender la sensación que tienen muchos mexicanos cuando leen la historia de su país.
De todos modos, de los herederos de los mismos colonizadores salieron también grandes líderes de la independencia. El homenaje permanente a las ideas republicanas del padre Servando Teresa de Mier está presente en toda la Macro Plaza; este fraile dominico y raíces familiares asturianas, verdadero líder de la Ilustración mexicana e inspirador de la independencia del 1821. En México, la España imperial se hundió junto con la decadencia generalizada del Estado decimonónico. En este 9N también muchos catalanes han dicho basta a una forma decadente de gobernar. Han apostado por un nuevo país.
- García-Castellón y Gadea dejarán sus plazas en la Audiencia Nacional y Pedraz sopesa hacerse con el juzgado del Tsunami, por Ernesto Ekaizer
- Barcelona, “decepcionada” y “preocupada” por que la Generalitat anuncie una desalinizadora flotante en el puerto sin avisarle
- El invierno vuelve por Sant Jordi: los meteorólogos alertan del fenómeno que nos espera la próxima semana en Catalunya
- Airbnb aconseja a los propietarios que no anuncien las piscinas en sus alojamientos turísticos
- El presidente del PP de Esplugues coló durante años facturas personales como gastos del partido para pagarlas con dinero público
- Vuelve Moisés a Pasapalabra: el concursante desvela los problemas que sufrió en el pasado y por los que tuvo que abandonar el programa
- DANA a la vista: estas serán las zonas más afectadas
- La tiña se expande en Catalunya entre los adolescentes que se rasuran asiduamente la nuca en las barberías 'low cost