tú y yo somos tres

El asado fue un masaje

Santiago Segura protagonizó el 'roast' de Comedy Central.

Santiago Segura protagonizó el 'roast' de Comedy Central.

FERRAN MONEGAL

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No le han rustido. Le han dado un masaje tailandés con litros y litros de Reflex y Linimento Sloan incluidos. Me refiero a esta novedad producida por El Terrat (Buenafuente) llamada El roast de Santiago Segura, y que acaba de emitir el  canal Comedy Central. El roast es un ejercicio televisivo muy arraigado en Estados Unidos. Se trata de convocar a un famoso y hacerle un homenaje a la inversa, o sea, ir dándole caña con sarcasmo y también con un poco de mala leche. Ese género lo popularizó Dean Martin en su show de la NBC de los años 70 y 80 (The Dean Martin Celebrity Roast). La víctima aceptaba el reto con absoluto fair play, y se prestaba a recibir mordiscos. Esta versión que han estrenado aquí ha sido un simulacro flojito. Todos los supuestos mordedores eran amiguetes de Segura. Veamos algunas pinceladas de lo que le decían. Álex de la Iglesia«Dejé escrito en los estatutos de la Academia de Cine que no te premiasen nunca»Silvia Abril«Nunca olvidaré el día que Buenafuente me presentó a Santiago, pero voy a seguir intentándolo»Jorge Sanz«Lo más guarro que has escrito en tu vida es tu curriculo»Wyoming«Torrente es el auténtico, el falso eres tú. Tú le presentaste a Urdangarin a la infanta»Kiko Rivera Paquirrín: «A todos los sitios que voy te defiendo. Te lo perdono todo porque te haces querer, tío». O sea, divertimento, espuma y amiguismo. Ni asaron a Segura, ni lo pretendían. La idea de un roast es atractiva si se acepta el juego corrosivo. Un buen roast sería meter a Wyoming en una parrilla y poner de asadores a Paco Marhuenda y Hermann Tertsch. Sería tremendo. Todos los años, en la cena anual de corresponsales de la Casa Blanca, juegan a este juego y el presidente de Estados Unidos se presta a hacer de víctima. Todavía se recuerdan los mordiscos que le pegó a George W. Bush, en el 2006, el sarcástico humorista Stephen Colbert. Eso aquí es impensable. Pero sería sanísimo.

LA CASA, LA MEDALLA, Y EL CARTIER .- La pareja Rosa-Amador han conseguido un gran momento en La isla de los mosquitos (T-5). Paseando por la playa, le dijo él: «La casa de Chipiona es mía. Y además me vas a devolver la medalla de mi madre y el Cartier». Y Rosa contestó: «A tomar por el culo», y agarró una canoa y ya ha regresado a Madrid. ¡Ahh! Dicen que Tele 5 está estudiando prolongar un poco más este concursito. Hombre, tú dirás. El grado de perfección de la astracanada es inaudito.