Semana Santa

Los datos de los dos primeros meses del 2014 sobre el turismo extranjero en España mantienen la tendencia de los últimos tres años y son sobre todo muy positivos en las islas Canarias. Si a ello añadimos que tanto los resultados ofrecidos hace una semana por la Asociación Corporativa de Agencias de Viajes Especializadas (Acave) con crecimientos de las reservas del 20% sobre el año anterior y los que se conocieron durante la celebración la semana pasada del Salón Internacional del Turismo de Catalunya (SITC)) de la Fira de Barcelona sobre el mercado interior, hemos de pensar que esta Semana Santa será una santa semana para el turismo.

La  industria turística española ha seguido un camino diferente al resto de los sectores durante la crisis económica. Diríamos que ha sido anticíclica y el periodo de recuperación va a ser más rápido si se cumplen las buenas expectativas actuales. Existe el consenso de que la crisis, por ponerle fecha de nacimiento, aparece en el cuarto trimestre del 2008 tras la caída de Lehman Brothers. En el sector turístico español dicha crisis no apareció hasta principios del 2012. Se había mantenido con buenos resultados económicos a lo largo de los tres primeros años dando incluso incrementos de puestos de trabajo hasta el 2011, aunque no se reflejaban en las estadísticas por tratarse de empleo temporal y en muchos casos sumergido. Así lo demuestran los estudios de la CECA sobre el 2010 y el 2011.

Esta Semana Santa plantea buenas perspectivas en el segmento del turismo de nieve ya que hasta hace diez días han caído nevadas sobre casi todas las zonas montañosas con oferta de esquí (Pirineos, Navacerrada, Picos de Europa) y por lo tanto se mantendrán abiertas la mayor parte de las pistas y con una buena ocupación. Ha sido una buena temporada de invierno. Pero además este año, por fin, el sector en general ha iniciado campañas de promoción de estos destinos para ser utilizados también en las otras estaciones del año. El turismo austríaco, que tiene mayor fiabilidad que nuestra oferta en el sector de la nieve, obtiene desde hace años el 70% de sus ingresos en estaciones fuera de la época invernal: primavera, otoño y verano.

Las nuevas promociones desarrolladas intensamente este año por empresarios privados y el sector público creo que pueden dar buen resultado en la próxima primavera y el verano para potenciar el turismo de interior que es del que estamos más necesitados en este momento. Todo ello solo será posible si se produce una recuperación económica.

En el panorama de estas buenas noticias solo existe una nubecilla que esperemos que no se transforme en nubarrón. Determinados destinos que tienen capacidad para competir en el mercado internacional por su buena relación calidad-precio, están rebajando tarifas estos últimos días para conseguir más ocupación. Y eso no solamente es una mala noticia sino que además es la peor manera de promocionar el turismo.

Justamente eso es lo que está haciendo la ciudad de Madrid. Bajar los precios es el peor servicio que se le puede hacer a nuestra industria turística. Si quieren ser más competitivos que aumenten la calidad de sus servicios que aun siendo buena ahí tienen margen para superarse, pero tocar los precios a la baja cuando la demanda desde el exterior está al alza no solo es incumplir las leyes del mercado de la oferta y la demanda, es abocar a todo el sector a una guerra que siempre acaba en derrota y catástrofe. Esperemos que despeje la nubecilla y vuelva el sol del sentido común durante la Semana Santa.