Análisis

La elección entre el mejor, el soldado y el aventurero

CÉSAR LUIS MENOTTI

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El Balón de Oro, con los tres candidatos elegidos, espera al ganador en medio de muchas y encontradas opiniones. Es muy difícil decidir, pero hay que elegir, esta es la realidad. Sea quien sea el elegido, la decisión dejará para muchos la sensación de no ser justa y dará lugar a la polémica.

Messi es para mí el mejor futbolista del mundo si consideramos lo logrado hasta hoy, no solo en títulos sino en crecimiento. Ha tenido temporadas brillantes, en cada pelota que pasa por sus pies aparece el misterio que termina sufriendo el adversario. Concreta jugadas determinantes, no solo en el gol, también en el pase-gol y especialmente en la gran participación en todas las acciones de tenencia de pelota, saliendo de lugares increíbles desde la magia de su técnica. Más participativo, fue creciendo año tras año como un ordenado aventurero. También es verdad que tuvo una temporada con gran acumulación de fatiga, con poca recuperación en tiempos, y bien que lo pagó con reiteradas lesiones. Un candidato.

Otro candidato, Cristiano Ronaldo, determinante jugador para el gol; él entiende el juego desde su aventura personal; si el gol no aparece, difícil que aparezca Cristiano. Ocurre que en la última temporada, desde el vértigo y la aventura cuando arranca su carrera, le dio la eficacia que sostuvo a un Madrid desdibujado, que se sostuvo y se sostiene desde la contundencia de Cristiano Ronaldo. Sus condiciones de futbolista, desde lo individual, son privilegiadas: excelente técnica, gran cabeceador, perfecta pegada, hábil y veloz, todo al servicio del gol más que del equipo. El gol apareció y tuvo una gran temporada.

No conozco el criterio

Dejé al otro candidato, Franck Ribéry, para el final. Candidato de lujo que, a diferencia de Cristiano Ronaldo, es un soldado del equipo, cumple con todas las obligaciones colectivas. Sin la magia del argentino ni la contundencia del portugués, es un gran jugador de fútbol. Un futbolista tiene obligaciones y posibilidades. Las obligaciones las marca el entrenador desde la organización del juego; las posibilidades las decide el futbolista mientras cumpla con las obligaciones. Ribéry siempre cumple con sus obligaciones desde su enorme participación, y sus posibilidades son muchas: hace goles, una presencia permanente al servicio ofensivo con gol y también combativo en la recuperación.

Es difícil definir el Balón de Oro, no conozco el criterio. Fue Cristiano Ronaldo tal vez el más importante para su equipo. Ribéry, gran jugador de equipo, y Messi, por trayectoria sostenida y crecimiento, el mejor jugador del mundo.