Los 31 brotes verdes de Báñez

La ministra nos tiene ya acostumbrados a anunciar que los españoles tendrán una buena noticia

VERÓNICA FUMANAL

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La ministra de trabajo Fátima Báñez está sedienta de dar noticias positivas para el país, que por fin ratifiquen la idea de que el Gobierno de Mariano Rajoy pretende transmitir: estamos saliendo de la crisis.

La ministra Báñez nos tiene ya acostumbrados a, en la víspera de la publicación de los datos del paro, anunciar que los españoles tendrán una buena noticia, que los datos son buenos y esperanzadores para el empleo, acabando con la coletilla, datos que nos animan a continuar trabajando para todos aquellos que todavía en España no tienen empleo. Estas declaraciones son la antesala de unos datos sobre el empleo con muchas lecturas, pero sobre todo, con pocas opciones para el triunfalismo.

Que el Gobierno de España haga de 31 personas un caso de éxito, demuestra hasta qué punto Mariano Rajoy se empeña en salir de su infierno-Bárcenas particular y vender una obra de gobierno basada básicamente en la agenda económica. La tan criticada reforma laboral del gobierno necesita datos cuantitativos para legitimar las decisiones gubernamentales, aunque cualitativamente los nuevos empleados dispongan de unas condiciones laborales sustancialmente peores que las de sus antecesores.

Desde la perspectiva de la comunicación política, la ministra Báñez debería considerar la posibilidad de quemar el concepto “recuperación económica”. En este caso, 31 empleados más frente a los casi 5 millones de desempleados son unos datos que llaman a la cautela y no al éxito, unos datos anecdóticos que en ningún caso deberían ser “vendidos” como una muestra de recuperación, sino como un “continuamos trabajando por el resto de los desempleados”.

Si la ministra Salgado acuñó la expresión “brotes verdes”, la ministra Báñez se puede convertir en la eterna Anunciación, aquella que crea expectativas que nunca se cumplen.

Verónica Fumanal, directora de Politikom