Duran, en horas bajas

LasdeclaracionesdeJosep Antoni Duran Lleidadel año 2000 deberían ir ahora acompañadas de la asunción de alguna responsabilidad política. Lejos de hacerlo, Duran se esconde, a la espera de la encíclica de su carta que semanalmente, religiosamente cada viernes, envía a la militancia socialcristiana. Y Unió, por vía de su portavoz,Marta Llorens, se dedica atirar pelotas fuera. La oposición, e incluso alguna voz convergente en la intimidad, se dedica apedir cabezas, mientras las redes sociales --Twitter al frente-- ponen aDuran en el punto de mira.

Como escribe hoyErnest Folchen nuestro diario, lacorrupción 'made in Catalonia'es el principal problema para que el Govern deArtur Mas parta hacia Ítaca con la hoja de ruta soberanista pactada conOriol Junqueras. Duran yUnió Democràtica suponen, en este sentido, un lastre para la causa independentista, pero al mismo tiempo el líder socialcristiano representa el ancla del barco de CiU con el 'statu quo', con la continuidad de Catalunya en el marco autonómico actual.

Duran dejó de ser el político español mejor valorado, según certificado demoscópico y mediático del CIS tras los comentarios del diputado sobre el PER y los andaluces. No ha levantado cabeza desde entonces en la valoración ante la ciudadanía. El último episodio de desgaste fue todo el debate sobre su supuesta afectación (negativa) en la campaña electoral de Mas. Que si habló, que si lo hizo demasiado... Fue la piedra en el zapato del candidato 'mesías'.

Y ahora, tras tres lustros, llega el acuerdo con la fiscalía que pretendía tapar la vergonzosa financiación ilegal de su partido con losfondos de los parados. El 'casoPallerols' es inoportuno para los intereses de Duran, porque elescándalo de corrupción le pilla en horas bajas. Pero el contexto soberanista, irónicamente, puede ser el salvavidas de Duran, única garantía ante los poderes del Estado español que CiU no se tire al monte llegada la hora de la verdad. Aunque alguna portada madrileña pretenda pegar a Duran para castigar a Mas, los más afinados saben que la mejor manera de perjudicar al 'president' sería blindando (aún más) a Duran. Curioso, ¿no?