¿Qué hacer hoy, 20 de marzo, en Barcelona?

Cada año hay una película que se convierte en el filme europeo de la temporada, traspasa fronteras y, sin hacer demasiado ruido, es un éxito sorpresa. Si en el 2021 ese título honorífico podríamos otorgárselo a la danesa Otra ronda, en este 2022 la favorita es La peor persona del mundo, una comedia dramática noruega dirigida por Joachim Trier (Thelma, El amor es más fuerte que las bombas) que, incluso, se ha colado en la carrera de los Oscar obteniendo dos nominaciones a mejor película internacional y guion original. Pero no es el único reconocimiento que ha logrado ya que su sorprendente protagonista, la joven Renate Reinsve, fue considerada la mejor actriz en el festival de Cannes.

La cinta sigue los pasos de Julie, una chica que se acerca a la treintena y aún no ha encontrado la estabilidad ni profesional ni personal, cambia continuamente de profesión y de pareja. Pero parece que todo empieza a tener sentido cuando inicia una relación con un dibujante de cómics underground (Anders Danielsen Lie), 13 años más que ella. La trama nos mostrará la evolución de Julie a lo largo de los años con sus altibajos, dudas, aciertos y errores. Al inicio es una persona y, al final, ha cambiado totalmente.

Un sincero retrato femenino

El filme está dividido en 12 capítulos, con un prólogo y un epílogo. Durante los mismos conoceremos su trato con los amigos de su pareja, sus problemas familiares, sus travesuras, sus alucinaciones o su postura frente a la sexualidad, la infidelidad, la maternidad o la muerte. Es un completo retrato femenino sobre uno de los personajes mejor descritos de los últimos tiempos, con el que resulta muy fácil identificarse seas del sexo que seas. Es humana, no es perfecta, se equivoca mucho y, cuando lo hace, te dan ganas de abrazarla muy fuerte.

Es una mujer que busca su propio camino y, de paso, a sí misma mientras una voz en off nos va describiendo sus sentimientos. El tono de la película es bastante ligero y tiene momentos cómicos aunque en la parte final predomina el drama. Por algo su director la ha definido como “la comedia romántica para la gente que odia las comedias románticas”. A nivel técnico destaca la escena de la cita entre los enamoradosdonde, al igual que en Big Fish, el mundo se detiene y la gente permanece inmóvil mientras vemos cómo los dos amantes se aproximan al reencuentro. Uno de esos momentos repletos de magia.

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El amor lo cambia todo

El realizador Joachim Trier declaró que durante mucho tiempo había querido hacer una película que fuera un poco más allá de las historias de amor normales en pantalla, donde todo es tan simple. Con ella pretendía “analizar seriamente las dificultades de conocer a alguien cuando estás luchando por descubrir tu propia vida, cuán irresolutas e inciertas pueden volverse incluso las personas más racionales y seguras de sí mismas cuando se enamoran; y lo complicado que es, incluso para los románticos, cuando realmente obtienen lo que han estado soñando".

Otro de sus alicientes es su nostálgica banda sonora que incorpora canciones tanto de Christopher Cross como de Harry Nilsson, Art Garfunkel o la legendaria Billie Holiday, además de recurrir a la música clásica de Erik Satie o Maurice Ravel. Una de esas películas pequeñitas que te enamora tocándote el corazón gracias a un personaje poliédrico y sensible, cercano y vulnerable que, pese a su equívoco título, puedes considerar la mejor persona del mundo.