Un musical de homenaje a Whitney Houston
¿Qué hacer hoy, 8 de enero, en Barcelona?
La versión teatral de 'El guardaespaldas' ofrece más canciones que la película
Eduardo de Vicente
Periodista
Reconozcámoslo, la película de El guardaespaldas (1992) era muy poca cosa. La dirección, muy plana, de un realizador del montón como Mick Jackson no ayudaba, pero es que la química entre los protagonistas, Whitney Houston y Kevin Costner era inexistente y el desenlace de la intriga, algo chapucero. Sin embargo se convirtió en un gran éxito debido, básicamente, a dos factores: el carisma de ambas estrellas en su momento más álgido y, sobre todo, las canciones que interpretaba ella. Para celebrar su vigésimo aniversario, en el 2012 se estrenó una versión teatral en Londres que ahora, cuando se cumplen 30 años del estreno del filme, llega a Barcelona y puede verse en el Teatre Coliseum hasta el 23 de enero.
Más canciones y menos trama
Sus creadores, muy inteligentemente, parecen haberse dado cuenta de todos estos factores y han dejado los diálogos reducidos al mínimo para destacar más las canciones. Y, no solo eso, ya que los espectadores no escucharán únicamente los temas que suenan en la película sino que se han añadido muchos más de la artista hasta el punto que bien podría llamarse sin ningún rubor Whitney Houston: el musical. Por lo tanto a quienes no les guste la película pero admiren el repertorio de la cantante pueden apuntarse sin problemas a la fiesta.
La trama sigue, a grandes rasgos, el guion cinematográfico que se inicia con las amenazas de un acosador a una diva del pop, Rachel Barron, que vive con su hijo y su hermana. La situación la lleva a contratar a un experto en seguridad, Frank Farmer, que velará por ellos y, aunque la relación entre ellos empezará con mal pie debido al extremo celo que él pone para cada aparición en público de la artista, con el tiempo irán acercándose mientras el misterioso criminal sigue haciendo de las suyas.
Puesta en escena y música
La puesta en escena es algo limitada para un musical que se espera más ambicioso y su principal, aunque algo desconcertante, elemento es la plataforma inclinada sobre la que se encuentra el atrezzo. Quizás funciona en la escena inicial en la que sirve para que Rachel y los ocho bailarines no bajen escaleras sino que simplemente desciendan o en el número de los Oscar para mostrar el espectacular vestido que ella luce. Hay que advertir que, desgraciadamente, tanto la música como los coros están pregrabados aunque los actores sí que cantan en directo.
El reparto
El primer número es de los más espectaculares, Queen of the night con láseres, luces estroboscópicas, fuegos y vestuario plateado donde Mireia Mambo nos ofrece un aperitivo de lo que nos espera con su potente voz. Ella es lo mejor del espectáculo intentando dar su visión propia de cada canción de Houston, no imitándola sino haciéndola suya, una decisión muy acertada ya que intentar emularla es casi una misión imposible.
Octavi Pujades ofrece el contraste como ese guardaespaldas que es todo planta y tan solo hace sus pinitos musicales en la escena de karaoke interpretando, con sus lógicas limitaciones, la popular I will always love you que tendrá un especial protagonismo en el tramo final ya cantada con brillantez por Mambo. En el reparto también destacan Sonia Egea, que sorprende con Saving all my love of you, y el divertido Sergi Albert que es uno de los miembros del equipo de Rachel, el más amanerado y quien aporta el contrapunto cómico.
Baladas y temas disco
En el repertorio hay baladas como la famosa The greatest love of all, Run to you (dúo entre las dos hermanas), I have nothing, donde Mambo saca todo su potencial para cerrar la primera parte, la romántica All the man that I need, One moment in time, que interpreta en la ceremonia de los Oscar o la melancólica I will always love you que cierra el espectáculo.
Pero también hay temas discotequeros que nos harán levantar de la butaca como How will I know, a modo de ensayo de un videoclip; So emotional, a la que se une la platea; I’m every woman con coreografías y tonos plateados o la propina final, I wanna dance with somebody, donde ya la entrega del público es total. Un musical con unos cuantos aspectos mejorables pero que cumple con su cometido de rendir homenaje a una grande de la música y de mantener a los espectadores vibrando con todas y cada una de sus canciones.
<div class="ep-film"> <div class="thumb"> <img alt="item" class="loading" src="https://estaticos-cdn.elperiodico.com/clip/clip/3a4134e6-23a8-4ba5-a6e0-f2a41ce55c4e_media-libre-aspect-ratio_default_0.jpg" pinger-seen="true" data-was-processed="true"> </div> <div class="txt"> <h3>'El guardaespaldas'</h3> <p><strong>¿Dónde?</strong> Teatre Coliseum (Gran Vía de les Corts Catalanes, 595).</p> <p><strong>¿Cuándo?</strong> miércoles y jueves (20.30 h.), viernes y sábado (18 y 21.30 h.) y domingo (18 horas). Hasta el 23 de enero. </p> <p><strong>Precio:</strong> de 28 a 58 euros.</p> <p><strong>Más información:</strong> <a href="https://www.grupbalana.com/es/teatros/obras/el-guardaespaldas/" target="_blank">Grup Balañà.</a></p> </div></div>
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