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Hostal de la Plaça, 'vintage' auténtico en Cabrils

Esta antigua masía del siglo XVII, llena de objetos de época, acoge un hotel de tres estrellas y un restaurante de cocina tradicional

Hostal de la Plaça, 'vintage' auténtico en Cabrils

Hostal de la Plaça, 'vintage' auténtico en Cabrils / periodico

Ferran Imedio

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La excusa del 75º aniversario del Hostal de la Plaça, en la plaza de l’Església, 32 de Cabrils (Maresme), es ideal para redescubrir un hotel tranquilo y de trato familiar a apenas media hora de Barcelona. El establecimiento cautivará a quien le guste el 'vintage' auténtico y a quien le pirre la cocina tradicional sin pretensiones pero bien hecha.

Es llegar a este emblema del Maresme y darse de bruces con la historia. Está en las paredes, con decenas y decenas de objetos de otras épocas que te recuerdan que aquello había sido una masía del siglo XVII que hace tres cuartos de siglo pasó a convertirse en una fonda en la que descansaban los pasantes que iban o volvían de Barcelona. Josep Galvany y Doloretes Mas regentaban un negocio que fue creciendo, que pasó a tener un restaurante muy conocido en la zona y que ahora dirige la cuarta generación de la familia, encarnada en la figura del treintañero Artur Masiques.

COMO VIAJAR EN LA MÁQUINA DEL TIEMPO

Repartidos por la casa verás una maleta de madera, unas planchas antiquísimas, cuadros y más cuadros, muebles de anticuario, platos pintados por la propia Doloretes, herraduras, relojes de pared, llaves enormes, la licencia de conductor de carro de Galvany… ¡incluso una factura de la remodelación de la masía llevada a cabo por el arquitecto Raimon Duran i Reynals! Es como viajar en una máquina del tiempo. Fascinante.

Hostal de la Plaça mantiene el aire sencillo de toda la vida, con un trato cercano y una vocación de servicio que alcanza hasta al aparcacoches. Y no resulta nada caro, pues en temporada alta la habitación más cara (doble superior) apenas supera los 100 euros, con desayuno incluido. Es un tres estrellas de nueve habitaciones (tiene otras cinco, más amplias y modernas, en una casa vecina) con unos precios muy competitivos, como el 'pack' romántico, que incluye cena para dos (cuatro entrantes, un segundo plato, postre y bebida), una noche y un desayuno por 160 euros. Si fuera el anuncio de un piso, entraría en la categoría 'Ideal parejas'.

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Todas las habitaciones son distintas entre sí. Todas están decoradas con muebles que usaron los antepasados de Masiques en algún momento. Todo aquí es auténtico. De otra época. Hasta lo que no forma parte del propio hotel, como las campanadas de la iglesia que hay justo detrás, y que suenan cada hora, sea de día o de noche. Está en pleno centro de Cabrils, y aun así la calma es absoluta.

Otro de los indudables atractivos de Hostal de la Plaça es su oferta gastronómica, basada en el recetario tradicional y elaborada con productos de proximidad. No hay fuegos artificiales en unos platos que todo el mundo reconoce y celebra, sea el 'capipota' de toda la vida como un canelón de verduras algo más' moderno', que se pueden acompañar con alguno de los vinos de una carta tan amplia como interesante.

MENÚ 75º ANIVERSARIO

Precisamente, con motivo del 75º aniversario, ofrecen un menú con los mejores platos que han servido durante todas estas décadas: los canelones de pollo de payés gratinados de 1943, los calamares a la plancha salteados con ajo y perejil de 1974... Se puede comer o cenar en la sala principal y en la terraza que hay encima (ambas, con vistas al mar), en la sala del interior (con aroma a fonda, chimenea incluida) o en alguno de los reservados (en su día fueron, por ejemplo, la cocina o la sala de estar de la familia).

Su encanto, como todo el establecimiento, es imbatible.