TEATRO

'Karen': ¿harías cualquier cosa por tu hijo?

El Teatre Gaudí acoge un ágil 'thriller' de Ever Blanchet, dirigido por Marta Gil Polo, que a partir de unos oscuros secretos familiares nos plantea un debate sobre convicciones éticas

'Karen': ¿Harías cualquier cosa por tu hijo?

'Karen': ¿Harías cualquier cosa por tu hijo? / periodico

José Carlos Sorribes

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Explica Ever Blanchet, el autor de 'Karen', que le inspiró un suceso real sobre un juez que no pudo llevar a juicio a dos adolescentes, uno de ellos acusado de matar a una joven, porque sus padres los sacaron del país antes de que pisaran la sala del tribunal. Este hecho dio pie al responsable del Teatre Gaudí a elaborar una pieza que plantea una pregunta muy concreta: ¿harías cualquier cosa por tu hijo? Como siempre sucede con las ópticas teatrales bien enfocadas, es al espectador a quien corresponde responder o, cuanto menos, debatir sobre el interrogante.

'Karen' discurre a buen ritmo bajo los parámetros de un 'thriller'. Se abre con la aparición de un personaje, Mario, que hace una llamada inesperada a un amigo, Andreu, después de una década de ausencia. Le anuncia su regreso desde Australia, donde ha vivido los últimos años. Poco después, Andreu recibe a su mujer, Carme, que también viene de lejos, de Colombia, donde acaba de visitar a su hijo, residente allí con su familia. Poco a poco, el encuentro se amplía con la aparición de un par de amigas y un joven de origen marroquí, nacido en Lleida, que dice ser el hijo de una de ellas.

En apariencia, todo se desarrolla con normalidad, pero hay un evidente mar de fondo. La aparición de Mario destapará un episodio largo tiempo olvidado. Un corte en la pieza nos lleva hacia un 'flashback' de 13 años que nos pone en situación. El montaje coge entonces un vuelo sostenido al embarcarse en un 'thriller' que se va desmadejando en cada escena.

No se trata de desvelar nada, los dichosos 'spoilers', pero entre Mario y Andreu urdieron una salida para librar a sus hijos de un episodio trágico: la muerte de la amiga de uno de ellos. Y con el joven, que responde a un nombre bíblico como el de Abel, como testigo. El texto de Blanchet se ramifica en el tema de la violencia machista como una lacra que afecta a todos los estratos sociales o a cuestiones éticas sobre dónde está la frontera de lo que puede hacerse cuando un hijo se sitúa al margen de la ley por un episodio trágico.

Espacio no naturalista

'Karen' funciona porque cuenta con una dirección tan inteligente como efectiva de Marta Gil Polo en un espacio no naturalista, que juega con la iluminación, cuatro sillas y una mesa. La directora mueve los peones con el dinamismo necesario para atrapar al espectador. Cuenta también con un reparto excelente en el que todo el mundo está en su sitio.

Armand Villén da la talla como Andreu, un comisario de policía sin escrúpulos y aire rancio, facha. Pep Planas también pone todos los matices como su amigo Mario, alguien que tiene mucho que ocultar. Isa Mateu es una expresiva enfermera, mientras Isabelle Bres y Maria Clausó también lucen experiencia. Carles Pulido, el más joven, muestra fuerza como Abel. Quizá podría haber más definición de algún personaje o situación clave del 'thriller', pero 'Karen' se merece el aplauso por una buena intriga que también es tragedia.