CINE

Robert Redford dice adiós al cine

El actor afirmó que 'The old man & the gun', un 'biopic' del atracador Forrest Tucker, será la última película de su carrera actoral. De ser eso cierto, es la despedida perfecta

Robert Redford dice adiós al cine

Robert Redford dice adiós al cine / periodico

Nando Salvà

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Despedirse de los seres queridos nunca es fácil. En el mejor de los casos, se nos concede la oportunidad de tener una última experiencia valiosa junto a ellos antes del adiós. Como tal debe entenderse 'The old man & the gun'. Aunque Robert Redford seguramente seguirá vivo algunos años más –deseamos que muchos–, él mismo dijo que esta película maravillosamente nostálgica será su último trabajo interpretativo. Y por tanto tiene sentido que, en ella, este icono de Hollywood dé vida a un icono de otro tipo, un venerable forajido con un historial delictivo tan completo como el currículo del actor que lo encarna: Forrest Tucker, que pasó toda su vida robando bancos, ingresando en la cárcel y escapando de ella –logró fugarse 18 veces con éxito–; y que, si la película está en lo cierto, siempre hizo todo eso derrochando gentileza y con una sonrisa en la cara porque, después de todo, aquel tipo de vida le hacía feliz. También 'The old man & the gun' derrocha gozo y placidez.

Ambientada a principios de los 80, cuando Tucker acababa de salir una vez más de prisión y estaba inmerso en una nueva sucesión de atracos, la película en efecto minimiza la violencia y el suspense en todo momento. El director David Lowery está más interesado en contemplar el incipiente romance entre Tucker y Jewel (Sissy Spacek), y se recrea mostrando a la pareja bebiendo té helado en el porche, o comiendo pastel, o rumiando sobre los sueños frustrados o el paso del tiempo. Uno podría contemplarlos durante horas.

Tributo doble

Tucker pasó 60 años enfrentado a la ley y Redford ha pasado el mismo tiempo frente a su público, y Lowery les rinde tributo a los dos. Desde la primera escena, Redford se contenta con encarnar sobre todo a Redford. Su personaje se llama Tucker, pero es más bien una versión crepuscular de cada uno de los delincuentes que interpretó en sus años de esplendor. A lo largo de su metraje, de hecho, la película incluye fotos y fragmentos de títulos como 'Dos hombres y un destino' (1969), 'Un diamante al rojo vivo' (1972) y 'El golpe' (1973).

En un momento del relato, preguntado por los motivos que lo impulsan a seguir robando pese a haber acumulado suficiente dinero para ganarse la vida, Tucker responde: "Yo no quiero ganarme la vida. Quiero vivirla". Y quizá también Redford acabe decidiendo que no tener ningún personaje más al que dar vida es demasiado aburrido. Sea como sea, 'The old man & the gun' es un broche de oro, una forma de cerrar su carrera actoral con increíble elegancia y, sí, con una sonrisa, y de hacernos sonreír a nosotros en el proceso.

TEMAS