EL NUEVO 'PLACE TO BE'

Abaixadors10: 'més que un club'

'Cocktail bar', club de baile con proyecto cultural y estudio de Radio Primavera Sound. Si hay una escena moderna en Barcelona, está en este nuevo espacio multiforme del Born

ABAIXADORS10

ABAIXADORS10 / periodico

Albert Fernández

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Es fácil quedar hechizado con la intensidad de neón del cocktail bar de Abaixadors10 cuando lo visitas por primera vez. Eso es justo lo que me pasa a mí. Tantos inputs de gente, moderneo fulgurante y la impronta del escenario en sí me sobrepasan mientras subo las escaleras del antiguo Casalot Montagut, al lado de Santa Maria del Mar, en el Born.

Así que cuando llego a la barra preguntándome si llevo el chándal adecuado, levanto la mirada y me atrapo cual mosca narcotizada con esa geometría luminosa de tubos fluorescentes que mutan y parpadean, proponiendo leves variaciones en el ambiente de un salón hecho de espejos, arcos estilizados, mesas altas y sofás de terciopelo. Puro retrofuturismo a medio camino entre una de Lynch y Blade runner.

Un tap-tap en el hombro me saca del trance: son Alba Riera y Álex Nikolov, los responsables de la programación de Abaixadors 10. Me piden otro cóctel de bienvenida mientras me dejan claro cómo ha nacido este nuevo place to be de Barcelona. Empezando por la presentación formal, es un proyecto de Lateral Thinking (agencia de eventos culturales) y Primavera Sound, sí, el festival más pepi que conoces.

En consecuencia, ABX10, como ellos lo llaman, es la casa de Radio Primavera Sound, la nueva radio online del festi. Alba subraya las intenciones vanguardistas del garito, un espacio abierto que busca dar voz a artistas emergentes y consolidados con una agenda cultural y musical diaria. 

El camarero arquea la ceja cuando me pregunta qué me apetece y le respondo titubeante "¿whisky sour?". Ya no debe de decirse así. Tendría que haber dicho "un Dracarys". A lo mejor acertaba. Alba aprovecha para poner nombre a la tercera parte de la alianza, Grupo Confitería, doblemente premiado por Paradiso y Dr. Stravinsky en la prestigiosa lista 50 Best Bars. La propuesta coctelera de ABX10 la firma Marc Álvarez, una eminencia en el sector. Y yo haciendo bromas. Cierto, el cóctel sabe ardiente y liberador.

Álex quiere rematar, y abunda en que la sala se convierte en club nocturno (de jueves a sábado), en espacio cultural (los miércoles), además de estudio de radio abierto al público (cada día), y en multi-espacio performático para presentaciones, proyecciones, lecturas, exposiciones, subastas de arte, mercadillos y mucho más.

Su entusiasmo se me sube a mí también. Alba lleva la programación cultural y Álex, la parte de música, y te digo que la cosa no podría estar en mejores manos: dos encantos con mirada joven y la antena muy puesta para recoger toda la tendencia en lo urbano y lo electrónico, con el foco puesto en los colectivos y la gente del mundillo que ahora mismo está luchando por crear una escena en Barcelona. 

Versos, música y vegetación

Mientras me cuentan todo esto, aparecen en escena unas chicas con mallas ceñidas que practican poses de danza contemporánea y miradas hieráticas, mientras reparten flores entre el personal. Por un momento creo que realmente me ha subido algo. Son las Pussy picnic, que pronto convierten el reopening de Abaixadors 10 en un ardiente infierno de versos, música y vegetación, hasta acabar completamente desnudas entre montañas de hojas y pétalos.

Alguien me cierra la mandíbula con su índice. Esto pasa en el black room, un amplio espacio hecho de paredes negras y un telón rojo, que es pista de baile, escenario y estudio de Radio Primavera Sound. Vaya, no puedo comprobar mi cara de idiota en el lavabo: no hay espejos. 

Decido volver a la barra láser caminando al ritmo de las bases de Awwz. Más caras conocidas, la barra a tope y allí están Alba y Álex de nuevo, con Tatiana, la project manager. Les pregunto por los espejos del WC. Resulta que cuatro colectivos de artistas se encargaron de intervenir el espacio y alterar desde los muebles a la iluminación, dando lugar a una fabulosa mélange de estampación, serigrafía y customización, que se aprecia en los bancos del patio inferior, e incluso en la ropa de los camareros.

La idea es que el espacio sea una obra de arte en sí. El tipo de sitio que te hace ponerte plasta con Instagram cuando viajas a Londres o Berlín, y que nunca encontrabas en tu ciudad.

Abaixadors 10 acaba de abrir, y su impulso por la vanguardia ha alojado propuestas de artistas como Princess Nokia, Rocío Quillahuamán, Yung Beef y Amaia, entre otros. Este septiembre, esa inercia les lleva a abrir las puertas a invitados de traca: un show del dúo Vengamonjas y una charla con el diseñador de moda Roberto Piqueras, para empezar.

Buah, he triunfado. Una amiga sabe la contraseña de la sala vip; un universo íntimo de sofás classy y pósters de pelis viejas desde donde puedo seguir adorando al neón mientras espío al personal. Porque va a venir todo el mundo. Nadie va a querer perderse esto.