Explosions In The Sky, 20 años de emoción instrumental

Repasamos la discografía del grupo posrock coincidiendo con su paso por Barcelona con motivo de la gira de su 20º aniversario

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Juan Manuel Freire

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Si hubiera que definir una Santísima Trinidad del posrock, que es como llamamos al rock instrumental más exploratorio desde mediados de los 90, seguramente debería estar formada por MogwaiGodspeed You! Black Emperor y Explosions In The Sky. Todos ellos han sobrevivido al cierto declive de popularidad del género y siguen ofreciendo álbumes y, sobre todo, directos apabullantes. Repasamos la discografía de los terceros, esa máquina tejana de catarsis colectivas, aprovechando su paso por Barcelona (lunes, día 3 de febrero, en Barts) con una gira de 20º aniversario.

'How strange, innocence' (2000)

Grabado solo en cuatro días, muestra a Explosions en forma embrionaria, lo que no significa nada malo. Es, simplemente, una versión más transparente (sin tanto 'reverb') y menos épica de lo que iba a venir después. Hay que reivindicar los ocho minutos de 'Magic hours', en la que ya mostraban igual habilidad en calma y tormenta, o la segunda e indiscutible mitad de 'Time stops'. Como el posterior 'The rescue', acaba de ser reeditado en vinilo, en versión remasterizada, con motivo del citado 20º aniversario de la banda. 


'Those who tell the truth shall die, those who tell the truth shall live forever' (2001)

Su verdadera carta de presentación ante el mundo. Carta escrita con virulencia: guitarras cristalinas pasan a ser asesinas en solo un pestañeo. Durante un tiempo, se habló de él por cuestiones extramusicales: el diseño y las notas interiores (en las que podía leerse "este avión se estrellará mañana") predecían según algunos los atentados del 11-S, pero la supuesta precisión de la profecía no era tal; el disco no salió el 10-S, como decía la leyenda urbana, sino el 27 de agosto.


'The earth is not a cold dead place' (2003)

En comparación con el anterior, casi optimista. La abrasión da lugar a una emoción otoñal pero triunfal que parece hecha para poner banda sonora a imágenes deportivas. Por eso les ficharon para participar en la banda sonora de la película y teleserie sobre fútbol americano 'Friday night lights', con la que muchos les descubrieron. La serie de NBC, todo un clásico moderno, explotó a conciencia temas del álbum como 'Your hand in mine' y 'Six days at the bottom of the ocean', inspirado por el naufragio del submarino 'K-141 Kursk'.


'The rescue' (2005)

Lo que se planteó como disco menor, un experimento compuesto y grabado en ocho días, acabó siendo una de sus obras mayores. En lugar de buscar grandes odiseas de tropecientos minutos, intentaron desarrollar ideas en marcos más breves, de dos, tres o cuatro minutos, y dieron con aciertos enormes. Un aviso para necesitados de inspiración en el gimnasio: la segunda mitad de 'The rescue', con su épica tranquila o sus ritmos casi militares, resulta perfecta para hacer ejercicio.


'All of a sudden I miss everyone' (2007)

La oxigenación creativa de 'The rescue' les sentó muy bien, y empezaron a preguntarse: ¿por qué hemos de limitarnos a dos guitarras, batería y bajo? Como en el anterior disco, vuelven a incluir voces (afinad la oreja a la altura de 'Welcome, ghosts') y por primera vez se atreven con el piano, muy presente en al menos un par de temas. La edición limitada en CD incluía un segundo disco con remezclas de, poca broma, Jesu, Mountains, Four Tet y Eluvium.  


'Take care, take care, take care' (2011)

Cuando algunos fans leyeron ese título (traducible como 'Cuidaos, cuidaos, cuidaos'), creyeron que Explosions se despedían, pero fue una falsa alarma: quedaba grupo para rato. Eso sí, en este disco empiezan a asomar ciertos automatismos y todo suena bastante familiar, casi demasiado. Solo sorprende la virulencia ocasional del sonido de la batería de Chris Hrasky. Si querían durar mucho más sin aburrirse y aburrirnos, iban a tener que sacudirse los hábitos. Y lo hicieron, vaya si lo hicieron.  


'The wilderness' (2016)

Antes de convertirse en imitación de sí mismos, decidieron dar un salto al vacío, o para ser más precisos, al vasto infinito del cosmos. Mencionaron '2001: Una odisea del espacio' como influencia fundamental de este álbum, algo que se evidencia en 'Colours in space', tanto por el título (una referencia al clímax psicodélico del clásico de Kubrick) como por una alucinada parte final. A lo largo del disco, los momentos de máxima ansiedad se alternan con los de belleza máxima, a veces en un solo tema. El gran hito es 'Logic of a dream', en el que se mueven fluida pero misteriosamente, con la lógica del sueño, entre polos musicales opuestos.