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'Último Resorte EP': escupitajos de veneno punk 'cosecha del 82'

Este álbum retrata la plaza Reial cuando no era el decorado para turistas en que se ha convertido hoy

Portada de 'Último Resorte EP', de 1982.

Portada de 'Último Resorte EP', de 1982. / periodico

Nando Cruz

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"Barcelona es todo un lujo: vicio y tentación mueven dinero", berreaban Último Resorte en la canción Barcelona es diferente. Era 1982 y por aquel entonces Silvia Escario y sus colegas punkis pasaban las tardes fumando porros en los bancos de la plaza Reial. Eso, cuando no se encerraban en el local a escupir lo que ella misma definiría años después como "crítica social, histérica, venenosa, sin sentido incluso, y con la teta al aire". Las anfetaminas y la rabia les permitieron comprimir las siete canciones de este epé en poco más de ocho minutos.

Tres décadas después, Escario lamentaba en el documental 'Peligro social' que la plaza Reial se hubiese transformado en un decorado para turistas para mover aún más dinero. Lo hacía, cómo no, en calidad de pionera del punk barcelonés.

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