Así es la Barcelona steampunk

Vestidos de época, flores y tazas de té hasta donde tu vista alcanza. No, no es el set de 'Los Bridgerton'. Y, aunque los sombreros de copa, las marionetas y las decenas de engranajes que llenan el local indiquen lo contrario, tampoco el de 'Charlie y la fábrica de chocolate'. «Damas, caballeros y autómatas», ha vuelto «el evento con más vapor del año», se presenta la Feria de Steampunk, una especie de portal del tiempo hacia un pasado retrofuturista que nunca existió, que este fin de semana celebra su séptima edición en la Nau Bostik (Ferran Turné, 1-11).

Pequeño inciso para aquellos a los que la palabra 'steampunk' les suene tan lejana como un acuerdo del Govern: se trata de un género literario, artístico y cultural que coge inspiración de la Inglaterra victoriana para crear una estética y sociedad con tecnología, moda y cultura anacrónicas cuyos fans replican con actividades de rol, manualidades, bailes, talleres y un largo etcétera de planes. Esta comunidad cada vez gana más adeptos («de 4 miembros en la Associació Retrofuturista Nautilus, hemos pasado a 40», asegura Vany Miranda, una de las responsables de la feria), y este tipo de eventos, que prevé unos 3.000 asistentes en esta edición, son una demostración de fuerza.

La agenda de la feria cuenta con una decena de planes que evocan el espíritu 'steampunk'. Por ejemplo, una carrera donde participan coches teledirigidos construidos por los propios asistentes, siempre con esa estética retrofuturista que los caracteriza. ¿La primera norma del circuito? «No se permite participar coches comprados, tienes que hacerlo tú», advierte Vany. La carrera «es un circuito de obstáculos», cuyos premios se reparten en diferentes categorías, como el mejor tiempo, el favorito del jurado y hasta «por el accidente más espectacular», al puro estilo 'Los autos locos'. 

Otro de los planes 'steampunk' son los duelos de té. Es fácil imaginarse el 'set-up': una mesa perfectamente colocada a la inglesa, la vajilla debidamente posicionada, con el té a la temperatura que marca el protocolo, y un tarro con galletas de media tarde listas para ser servidas. Los contrincantes se posicionan uno frente al otro con la misma tensión que un encontronazo entre Rhaenyra Targaryen y Alicent Hightower. Empieza el reto: «Cogen una galleta, la sumergen en el té y, pasados cinco segundos, tienen que incorporar la galleta y ganará el que más tiempo aguante sin que se desmorone», explica Vany. 

Baile ‘steampunk’

Para demostrar la versatilidad del género, también habrá 'shows' de baile 'steampunk', a cargo de Asrai Dansa (Torrent d’en Pregària, 18, Mataró), cuya responsable, María Almudena Ferreira, descubrió el género en 2015 y se quedó prendada, hasta el punto de convertirse en una pionera en España impartiéndolo con clases recurrentes. La música 'steampunk' bebe de muchos géneros, como jazz y 'west'. Los bailes, por lo tanto, se adaptan a estos ritmos. Sin embargo, lo que los caracteriza es que sus bailarines recurren a la interpretación para darle ese toque rol que tiene el 'steampunk': «Por ejemplo, si hacemos 'country', nos pondremos en el papel de unas pistoleras», cuenta la coreógrafa. 

A estos planes se sumarán presentaciones de libros, mesas redondas, talleres y muchas manualidades, como un taller de marionetas del siglo XIX. Y no puede faltar uno de los pilares 'steampunk': la estética. ¿Cómo conseguir un 'outfit' apropiado para el evento? Algunos asistentes se lo hacen ellos, otros, menos diestros hilando, optan por tiendas vintage o sombrerías donde pueden encontrar piezas basadas en la estética del 1850 y 1910. Pero la experiencia 'steampunk' completa está en dos locales: Uchronic Time (Galeries Maldà, Portaferrissa, 22), tienda íntegramente dedicada al steampunk, y la barbería Mr. Braz Steampunk (Basses de Sant Pere, 9), que estará en la feria ofreciendo su asesoría capilar. Y todo listo para disfrutar de un fin de semana a todo gas (a vapor, más bien).

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