Marchando un estofado de serpiente: dónde comer pitón en Barcelona

Aquí entenderás cómo se sentía Indiana Jones en el banquete del templo maldito. “¡Una de serpiente en 5 minutos!”, gritan como si nada. Sonríes con más tensión que una miss al ver aparecer la cazuela. Está entre las “recomendaciones especiales” de esta semana: estofado de pitón.  

Sanabres (Taquígraf Serra, 24). Este es un restaurante y charcutería familiar. Su especialidad son los chuletones de vaca madurada. Los hacen a medida, sonríe Rafa. «Como en una sastrería». Rafa González lleva aquí toda la vida. No exagera, casi nace en el restaurante. En marzo cumplen 50 años. “Algo haremos”, adelanta. Dale cinco minutos y descubrirás que es especialista «en cosas raras», que dice él. De camino al baño habrá expuestos 6.000 pins. Y es «una pequeña parte» de sus colecciones. Tiene más de 300 tipos de ginebras, 400 de whisky, 150 referencias de vinos. Ven con tiempo. 

Rafa ya habla de cocodrilos y pitones como si viviera en un documental de La 2. Empezaron a traer carne exótica con las vacas locas, recuerda. Suelen servir hamburguesas de canguro, cebra, camello y cocodrilo (según disponibilidad, depende de los envíos). Todas a la plancha, sin pan ni salsas. «Para diferenciar los sabores», justifica. «La pitón la intentamos también hacer a la plancha –recuerda–, pero es un chicle». 

Llega a la mesa el estofado de serpiente (20 €). Da morbo, aunque no haya rastro de lengua viperina. Podría pasar por fricandó. Está sabrosa, sí, aunque no atinas a sacarle sabores parecidos. Hay quien la compara con un pescado fuerte, dice Rafa, «tipo anguila y lamprea». El plato queda limpio. Si quieres probar, no tardes, que solo tienen 3 kilos. Ahora están buscando “bichitos”, que dice él, para las ensaladas. “Saltamontes y cosas de esas”, se ríe. “Hay gente que prueba todo”.    

'Burgers' exóticas

“¿Te atreves con el cocodrilo?», te animan en L’Empanat (Monlau, 60). “Pobrecito”, les suele soltar algún cliente al verlo en la carta. «Pero para unos zapatos no lo dudarías, ¿no?», les suele replicar Jordi Gaya. «Piensa que él no dudaría en comerte a ti».

‘Joc de cartes’ (TV-3) la subió al podio de hamburgueserías más originales de Barcelona. Terracita en la plaza de Masadas, ambiente familiar. Nadie diría que la cocina parece ‘El libro de la selva’. Puedes escoger ‘burgers’ al gusto con carne de cocodrilo, avestruz, cebra, jabalí y ciervo. La preferida de la chef, Marta Portero, es la de avestruz. «Es como una ternera». Sabrosísima.

En Volta al món (Muntaner, 51), les preguntan si la carne viene al punto o saltando. Aquí se puede pedir solomillo de canguro a la brasa con mermelada de kiwi.

No es la única carne exótica que se suele avistar en su cocina. A finales del próximo mes -adelanta Marcos Fachini, el propietario del local- es posible que les llegue cocodrilo, cebra, búfalo y bisonte. Han llegado a emplatar una pitón. “¿Qué tenéis para postre? –les preguntan con la boca abierta–, ¿pingüino?”.