Patrimonio artístico

El (aún) incierto futuro de las pinturas de Sijena: ¿volverán a Aragón o seguirán en el MNAC?

Este lunes se reúne el patronato del MNAC para fijar la postura de la institución ante la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a devolver las pinturas de Sijena y empezar a despejar las muchas dudas que aún quedan sobre el litigio

Los “viajes” a Nueva York y Londres de las pinturas de Sijena: solo fragmentos sueltos y tres antepasados de Cristo

Sijena por el mundo: el disperso tesoro del monasterio por el que Aragón no litiga

Imagen de archivo de las pinturas murales del Monasterio de Sijena (Huesca) en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). EFE/Toni Albir

Imagen de archivo de las pinturas murales del Monasterio de Sijena (Huesca) en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). EFE/Toni Albir

David Morán

David Morán

Barcelona
Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El futuro de las pinturas murales de Sijena debería comenzar a resolverse este lunes, después de que el Patronato del Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) acuerde en una reunión extraordinaria cómo responder a la sentencia del Tribunal Supremo del pasado 28 de mayo. El Alto Tribunal, recordemos, desestimó los recursos interpuestos por el MNAC y la Generalitat  y obligó al museo a restituir al monasterio oscense las pinturas arrancadas en 1936 y conservadas desde entonces en Barcelona. El día que se hizo pública la sentencia, el director del museo, Pepe Serra, ya avanzó que sería el patronato del museo, integrado por la Generalitat de Catalunya, el Ministerio de Cultura y Deporte y el Ayuntamiento de Barcelona, el que marcaría el camino a seguir. Será esta semana, pues, cuando empiece a escribirse el desenlace de un caso Sijena sobre el que aún pesan unas cuantas incógnitas.  

La opinión compartida por todos los expertos y repetida en los últimos días es que sería una temeridad mover las pinturas, un conjunto de fragilidad extrema. Desde que en 1936 fuesen arrancados de las paredes del monasterio durante un incendio, los murales han sido, en palabras de Pepe Serra, “un enfermo en coma”. Sí que es cierto que algunos fragmentos viajaron en 1970, 1984 y 1991 para sumarse a exposiciones colectivas en Nueva York y Londres, pero el conjunto no ha salido nunca del MNAC. La parte aragonesa, por contra, ha insistido estos días en recordar que, durante el juicio, los peritos catalanes dijeron que no era imposible trasladar las pinturas. La propia jueza concluyó que el movimiento era viable siempre que se adopten las medidas y precauciones necesarias para ello.

Según recoge la sentencia, una de las expertas de la Oficina de Patrimoni Cultural de la Diputació de Barcelona propuesta por Generalitat y MNAC declaró lo siguiente: "las pinturas no soportarían un segundo arranque, es decir no se puede separar la pintura del soporte de tela ni la tela del actual soporte de madera, la estructura que le da rigidez, que le da consistencia, es decir soporta todo el peso de las pinturas. Se podrían separar estos arcos y juntamente con las maderas se podrían mover, lo que he dicho que no se podría hacer es colocarlos, en la misma sala capitular no cabrían. Independientemente de estos problemas de climatización y de humedad [...] No es recomendable el traslado".

29/05/2025 Varias personas observan las pinturas murales del Monasterio de Sijena expuestas en el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC), a 29 de mayo de 2025, en Barcelona, Catalunya (España). El Tribunal Supremo (TS) confirmó ayer la sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Huesca, que condena al MNAC a restituir las pinturas murales en la sala capitular del Monasterio de Vilanova de Sijena (Huesca). CULTURA Kike Rincón - Europa Press

Varias personas observan las pinturas murales del Monasterio de Sijena expuestas en el MNAC / EP

En el museo, las pinturas murales ya no son murales, sino otra cosa: una “bomba de relojería muy sensible a los cambios ambientales" y "químicamente muy reactivas", según la jefe del Área de Restauración y Conservación Preventiva del MNAC, Carme Ramells. En este sentido, el proceso de conservación y restauración ha sido determinante ya que, tras arrancarlas en 1936, Gudiol las restauró en la Casa Amatller y las reintegró en un nuevo soporte. Según se ilustró durante el juicio, se extrajo la película superficial de las pinturas dibujadas en las paredes del monasterio mediante la técnica del strappo y se colocó en un soporte flexible que las ha convertido en “pinturas sobre tela”. “La tela está tensada en parte sobre madera y en parte sobre unas cuadrículas, una retícula de listones de madera, donde las telas de algodón están tensadas en las partes planas, mientras que en las partes curvas están en madera directamente”. La pintura, añadieron los peritos, no ha dejado de ser un fresco y dado que las telas están clavadas en los soportes de madera, así que sacarlas de ahí sería un segundo “arrancamiento”.  

Como partes condenadas, son el MNAC y la Generalitat quienes han de encargarse del traslado y la restitución. A la espera de lo que decida el patronato, Aragón ya ha pedido repetidas veces que se permita el acceso a sus técnicos para conocer el estado de las pinturas. Esta misma semana, la consejera aragonesa de Cultura, Tomasa Hernández, ha enviado al presidente del patronato, Joan Oliveras, una carta reclamando acceso para que los técnicos “conozcan de primera mano y los con los medios técnicos adecuados no solo las mismas pinturas y su sistema de montaje expositivo actual, sino también toda la documentación vinculada a estos bienes y generada por el MNAC durante el tiempo que han permanecido en sus instalaciones". En su día, el presidente de la comunidad, Jorge Azcón, dijo tener listo un “plan de desmontaje, traslado, conservación, restauración y exposición de todas las pinturas murales" cuyo contenido no ha trascendido. 

Arriba, las pinturas murales de Sijena expuestas en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). Sobre estas líneas, el Monasterio de Sijena. Abajo detalle de los frescos | Europa Press04/08/2012 Monasterio de Sijena. La consejera de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez, ha afirmado este jueves que, "después de las últimas obras", la Sala Capitular del Real Monasterio de Villanueva de Sijena (Huesca) "cumple absolutamente de sobra" las condiciones necesarias para albergar las pinturas murales que están depositadas en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). HUESCA CULTURA ARAGÓN ESPAÑA EUROPA DGA monasterio sijena

El Monasterio de Sijena / EP

De la Sala Capitular del monasterio de Santa María de Sijena salieron las pinturas en 1936 y, según la justicia, ahí deberían volver. El retorno de una remesa anterior de bienes de Sijena en 2016 puso de manifiesto las deficiencias del edificio, extremo que se ha querido corregir con una inversión millonaria. "Gracias a la reforma que inauguramos hace unos meses, podemos afirmar que Sijena cumple con todas las condiciones técnicas y de seguridad para volver a albergar las pinturas murales. La estabilidad de las condiciones medioambientales de la Sala Capitular se puede acreditar y es incuestionable”; celebró Azcón. Con todo, los expertos apuntan un detalle nada menor: los arcos del MNAC que exponen los murales no tienen las mismas dimensiones que los de la sala que debería acoger la reintegración. 

El abogado de Villanueva de Sijena, Jorge Español, ha llegado a decir durante todo el proceso que el conjunto mural del monasterio podría estar valorado en 1.000 millones de euros, pero los 43 fragmentos murales fueron tasados durante el litigio por una cantidad sensiblemente inferior: 300 millones de euros. En 2016, antes de que otro juez paralizara la ejecución temporal de la sentencia que obligaba, ya entonces, a devolver las pinturas, el MNAC reclamó al gobierno aragonés un garantía de 150 millones de euros por si las obras tenían que regresar de nuevo a Barcelona. 

Conjunto de pinturas profanas también afectadas por la sentencia

Conjunto de pinturas profanas también afectadas por la sentencia / MNAC

Prácticamente descartada la vía del Tribunal Constitucional, la única opción sería que se acredite la imposibilidad de ejecutar la sentencia y se buscase una medida equivalente para compensar a Aragón. En este campo, esencialmente técnico, cobraría especial importancia el papel del Ministerio de Cultura, que podría encargar informes técnicos que avalaran los riesgos que señalan desde el MNAC. No sería la primera vez, pero el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ya ha manifestado en más de una ocasión su voluntad de cumplir la sentencia. 

Además de las pinturas de la sala capitular, la sentencia también afecta a otro conjunto pictórico de Sijena custodiado por el MNAC: los 25 metros lineales de pinturas profanas que se encontraban en la sala de la Reina del monasterio y se exhiben en Barcelona en una sala diferente. Se trata de ocho paneles arrancados en 1960 y seriamente dañados por el fuego que decoraban la parte superior de los muros de una sala situada entre la iglesia y el claustro con escenas como el asalto de San Juan de Acre.  

Suscríbete para seguir leyendo