Cine

'Almudena', el documental que refleja la cara más alegre e íntima de la escritora madrileña

La película, presentada en el BCN Film Fest y que se estrenará el 15 de mayo, es evocada por el círculo más cercano de la escritora

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Almudena Grandes en el documental sobre su figura que llegará a los cines el próximo 15 de mayo.

Almudena Grandes en el documental sobre su figura que llegará a los cines el próximo 15 de mayo. / EPC

Elena Hevia

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Barcelona
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Ver a Almudena Grandes derrochando en pantalla su singular poderío vital, exhibiendo la fuerza de sus convicciones y su humor socarrón –“la palabra que más gusta es ‘dejadme en paz’”, dice la autora-, supone para su viudo Luis García Montero y los hijos Mauro y Elisa, un “pellizco”. Es la manera modesta y cercana que tiene el poeta de definir el dolor de un duelo que este mes de noviembre cumplirá cuatro años tras una muerte que “será ya cosa del pasado y no tanto del presente”. El ‘pellizco’ se produce durante el visionado de ‘Almudena’, un documental que se vio en el Festival de Málaga y se ha pasado este jueves en el BCN Film Fest (el próximo sábado habrá otro pase) con la presencia de García Montero y de su directora, Azucena Rodríguez, buena amiga de la novelista y directora a su vez de la adaptación al cine de ‘Atlas de Geografía Humana’. El documental se estrenará en cines el próximo 15 de mayo.  

Las primeras imágenes de la película las grabó Rodríguez en el domicilio madrileño de la pareja como una especie de tanteo para un posible documental. Luego llegó la pandemia, el terrible diagnóstico, la muerte de la autora y el estado de shock en el que quedaron familiares y amigos: “Una productora que conoce bien a Almudena me sugirió tiempo después que volviera a considerar el proyecto” y ese fue un nuevo principio. García Montero confió plenamente en Azucena: “Me gustó la decisión de no convocar a catedráticos, críticos literarios o políticos que hablaran de ella y apostar por imágenes de la propia Almudena mezclando su vida con las de los demás, que la siguen recordando al tiempo que ponen a una plaza de un pueblo, una biblioteca o una estación le ponen su nombre”. 

Buscando la complejidad

Una joven Almudena, tensa pero con las ideas muy claras, convertida a los 27 años en la sensación del momento como ganadora de un premio como el Sonrisa Vertical de literatura erótica por ‘Las edades de Lulú’, se alterna en la película con su amor a la cocina -un relax para ordenar sus ideas como escritora- y se codea con la mujer ocurrente y desinhibida que recuerda cómo sus hermanos le aseguraban que a ella, niña “gorda y peluda”, la recogieron unos gitanos o las invectivas que soltaba en medio del bullicio doméstico: “¡Cervantes, en la cárcel, podía escribir más tranquilo!”. “Es bonito verla joven y madura, delgada y entrada en carnes, tostada por el sol de Rota donde veraneábamos o pálida por sus encierros de escritura”, valora el viudo, que evoca el momento en el que escribió su segunda novela, 'Te llamaré Viernes', y decide no seguir el camino de autora erótica que se esperaba de ella sino convertirse en “escritora de calidad”. 

Por menos conocidos, es interesante ver a los hijos, Elisa, la hija de ambos, en las antípodas del pensamiento de los padres pero no por ello menos vinculada a su familia, que evoca otra muerte tras la de la madre, la de su bebé a los 15 días de nacer, después vinieron las del padre y la madre de García Montero, en un año nefasto para el clan. También Mauro, fruto de un matrimonio anterior, la recuerda disfrutando de la lectura de Stephen King o de ‘Juego de tronos’. Y es que lo que más preocupaba a la autora era la legibilidad. “Empezó a escribir en un momento culturalista, donde escritores como Juan Benet sostenían que la mala literatura era la que entendía la gente. Ella en cambio, supo que la calidad y el rigor no significa escribir cosas que solo entiendan los novelistas experimentales. Llegar a la gente es la gran tarea de la cultura”. 

Acostumbrarse a que no esté

Voluntariamente, la película deja al margen todas las diatribas con las que la derecha española se ha ensañado con la autora y es que tanto García Montero como Rodríguez consideran que frente al odio, tan presente en redes sociales, es mejor hablar de la amistad y la alegría. 

Y finalmente, aunque la inquietud aparezca en la película sin subrayados es preciso preguntar: ¿cómo se vive sin Almudena? La amiga, que recientemente también ha enviudado, asegura no haber acabado todavía el duelo, mientras García Montero ha podido filtrar su dolor gracias a las palabras en el poemario ‘Un año y tres meses’: “Se vive teniéndola muy presente. Tienes que acostumbrarte a que su ordenador esté apagado, en la nevera no estén las cosas que ella tomaba, que en el baño haya una sola toalla o que el sofá donde veíamos la tele te parezca mucho más grande. Quien tenga otras ideas puede pensar en el infierno o en el paraíso, pero para quienes no somos creyentes hay que acostumbrarse a convivir con el recuerdo en un diálogo diario que me dice que tire adelante los años que me queden”.