Libros

"Homo Femeninus": Pere-Joan Cardona y Josep Tomàs liquidan a los hombres

¿Qué hace un investigador biomédico y un profesor de filosofía atraído por las reflexiones sobre la evolución escribiendo a cuatro manos una novela?

Hoy lo explicarán a Parcir en la presentación de una narración que quiere hacer reflexionar sobre nuestra especie... o la próxima

Josep Tomàs y Pere-Joan Cardona con el libro que presentan hoy en la Parcir.

Josep Tomàs y Pere-Joan Cardona con el libro que presentan hoy en la Parcir. / Susana Paz

Susana Paz

Manresa
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Cuentan que su relación es del siglo pasado, pero han viajado a un futuro, relativamente cercano, en 2044 ya uno más lejano, en 2145, para narrar la historia del 'Homo Femeninus' (Libros Parcir). Pongamos el contexto: desaparece el cromosoma Y a causa de una epidemia de esterilidad y, por tanto, el único sexo de nuestra especie que queda sobre el planeta es el femenino. Adiós a los hombres. Tirante de argumentos científicos y de preguntas sobre la razón de ser del ser humano, un científico como Pere-Joan Cardona Iglesias y un profesor de filosofía como Josep Tomàs Puig, subdelegado y delegado en el instituto Lluís de Peguera cuando vivían en el siglo XX, firman una obra de ciencia ficción que presentan hoy en la librería Parcir de la capital del Bages. Ambos manresanos expondrán «el destino inevitable de la especie humana» acompañados del musicólogo y ensayista Oriol Pérez (19 h). Y después de anunciar el futuro en Manresa, lo harán en Barcelona el miércoles 19 de febrero (19h), en la Librería Ona, con la comunicadora científica Cristina Junyent y el crítico Joaquim Noguero.

LA RELACIÓN. Después de la pandemia de la covid-19«a todo el mundo le hervía la cabeza». A Cardona y a Tomás también. Y en sus conversaciones se gestó una pregunta que se convirtió en el trampolín de su primera novela a cuatro manos: ¿Estamos preparados para afrontar los retos de futuro como especie? Empezaba una «provocación» dialéctica a ambos lados sobre este futuro en un momento en que, apunta Cardona, «el ser humano no tiene ningún competidor natural. Es el rey del planeta. El único competidor son los microorganismos parásitos». Empezaban a tensar del filme que les llevaría a un nuevo cuestionamiento, cargado de connotaciones éticas, señala Tomàs: «¿Deberíamos artificializar nuestra reproducción y, por tanto, controlarla?». Porque, en realidad, señala el investigador biomédico, "biológicamente, la mitad de nuestra especie es ociosa". La que lleva el cromosoma Y. Y de nuevo biológicamente hablando, "el cromosoma Y está destinado a desaparecer, está en constante degeneración". Y eso, remarcan ambos, no es ciencia ficción. Primera conclusión: «¿Y si fabulamos con lo que sería para nosotros una sociedad ideal y escribimos una novela?». Segunda conclusión: "Esto será muy divertido". Tercera: «¿Nos estamos metiendo en un jardín?».

LA GESTACIÓN. "Una de las características más humanas que se mantiene desde la Edad de Bronce, hace 5.000 años", explica Cardona, es que esta mitad "ociosa, la parte biológicamente inútil, se ha dedicado a controlar y dominar la parte que mantiene la especie". La situación después de una pandemia mundial y el inicio de la guerra de Ucrania -«otra demostración del engordamiento y la necesidad de poder de los machos, que siempre tienden a la autodestrucción», dice Cardona-, acabaron generando un combustible ideal para empezar la narración a cuatro manos: «Yo lo provoqué y él hizo. Situar la narración inicialmente en el 2044, dentro de veinte años, con una epidemia de esterilidad mundial «podría ser verosímil», aún más si se piensa que en unas semanas se cumplirán 5 años de la pandemia de la cóvid 19. ¿Quién lo iba a decir?

EL PARTO. Explican, muy en serio, que si Homo Femeninus tuviera una banda sonora ésta podría ser Imagine: pero avisan, «John Lennon se quedó corto». La nueva sociedad imaginada por Cardona y Tomàs es una “sociedad femenina. Nos hemos cargado el patriarcado, los ejércitos, las fronteras, el poder, los líderes, la religión...» El experto en microbiología no habla de empoderamiento; prefiere una palabra inglesa, flourishment, para definir una nueva especie «mucho más orgánica, mucho más ligada a la naturaleza, con espacio suficiente para desarrollarse como quiera». La pregunta es: ¿esto también es ciencia ficción? Para Cardona, la respuesta es clara: «ser como somos no es nuestro destino: nada cromosómico. La solución es la cultura; podríamos cambiarla». Olviden el determinismo. Por tanto, apunta Tomàs, la idea de Homo Femeninus es «sacudir» e imaginar «una nueva sociedad en clave totalmente femenina» que deje de lado toda la violencia masculina implantada por el patriarcado para asegurar la especie. Porque en Homo Femeninus, como leerán, ya no hace falta.

ES NIÑA. Pero que el sexo masculino no se confunda. Aseguran que la novela «no es ningún ejercicio de autoodio hacia nuestro sexo», dice Cardona, porque la biología lo que dice es que el macho vive para «fecundar a quien sea hasta su muerte». Y que tampoco nadie se confunda, «en la novela hablamos de sexos, no de géneros. La diversidad de géneros es tan variada o más que ahora». Por si alguien tenía ninguna duda. La novela quiere hacer «reflexionar y abrir debates que, por qué no, podrían llevarse a las aulas». Lo dice el profesor, dispuesto a buscar el interés de sus alumnos con historias «que les motiven». Y que les hagan buscar el porqué.

EL NOMBRE. Homo Femeninus. Año 2044. Para buscar una solución a la epidemia de esterilidad se constituye un gabinete de crisis de ámbito mundial liderado por el dr. Markus Ryder. El origen es masculino y habrá que inseminar a las mujeres artificialmente. La desaparición del cromosoma Y es irreversible y el único sexo de nuestra especie será femenino. Un siglo después, el estudiante Èlia Muntaner tropieza con las memorias del dr. Markus... el único protagonista masculino de la novela. ¿Por qué será?