Entrevista

Nadine Sierra, la nueva reina del Liceu: "Debemos luchar contra la violencia, la agresividad y la gente que quiere dividirnos"

La soprano norteamericana se despide este sábado tras un fulgurante éxito en el coliseo barcelonés, al que regresará esta temporada con 'La sonnambula', un concierto con Pretty Yende y el musical 'West Side Story'

Nadine Sierra conmueve con una 'Traviata' de lujo

La soprano Nadine Sierra, en el Liceu

La soprano Nadine Sierra, en el Liceu / Manu Mitru

Marta Cervera

Marta Cervera

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La soprano Nadine Sierra (Fort Lauderdale, Florida, 1988) no lleva corona pero es la nueva reina del Liceu. El teatro se viene abajo después de cada función de 'La traviata'. El público entusiasmado ovaciona su impresionante interpretación de Violetta Valery porque Sierra lo tiene todo, capacidad vocal y actoral, además de juventud y belleza que van como un guante al personaje de la cortesana que da título a esta famosa ópera de Giuseppe Verdi. Aunque este sábado acaba sus funciones, Sierra volverá pronto al Liceu. En abril le espera un concierto con Pretty Yende y la ópera 'La sonnambula', de Bellini, y en julio, el musical 'West Side Story', en versión concierto dirigida por Dudamel.

¿Le da pena acabar las funciones en el Liceu?

Eso siempre ocurre, especialmente cuando las funciones despiertan tanto entusiasmo. Me entristece no solo dejar de actuar sino dejar esta ciudad. Me lo he pasado muy bien disfrutando del invierno barcelonés, mucho más amable que en el resto del mundo.

Se ha convertido en la nueva reina del Liceu. ¡Menudos aplausos y bravos le han dedicado!

(Ríe) Me siento llena de gratitud por la respuesta del público. Me entusiasma ver que estoy alcanzando uno de mis principales objetivos. Siempre he querido ser una servidora de la ópera pero también una guerrera para luchar por ella. No se trata solo de mantener la ópera viva. Quiero que siga floreciendo e inspirando a la gente como me inspiró a mí. Para impactar emocionalmente a los espectadores has de entregarte completamente y darlo todo en escena. ¡La ópera ha de entusiasmar!

¿La primera vez que escuchó una ópera ya lo sintió?

Totalmente. La ópera cambió mi vida. Tenía 10 años cuando vi mi primera ópera y decidí que me dedicaría a ella. Es un poco raro para alguien tan joven pero yo sentí que esa emoción y esa increíble profundidad se adueñaban de mí. Me impresionó que la música te pudiera penetrar de tal manera. Iba directa a mi alma.

Y eso le ocurrió con una grabación en VHS de 'La bohème', ni siquiera fue un espectáculo en vivo.

Era la producción de Franco Zefirelli que aún ponen en el MET que interpretaban José Carreras, Teresa Stratas y Renata Scotto con James Levine dirigiendo la orquesta. Uno de mis sueños precisamente es debutar en el papel de Mimì con esta producción y en Nueva York. Ya lo he hablado con Peter Gelb, el director del MET, y está de acuerdo pero no puedo decir más.

Barcelona 27/01/2025 Barcelona. Nadine Sierra, soprano. Está triunfando en el Liceu con 'La traviata'. AUTOR: MANU MITRU

La soprano Nadine Sierra, en el Liceu / Manu Mitru

¿Con qué otros roles sueña?

Cantaré Desdémona en algún momento y Maria Stuarda. También tengo previsto Anna Bolena. Pero quiero seguir cantando más Violettas, Manons e incluso mantener papeles de un repertorio más ligero que me encantan, como Adina y Amina, con el que próximamente volveré al Liceu.

Su voz se adapta a una gran variedad de compositores, como Verdi, Bellini o Mozart, pero también ha cantado ópera francesa y alemana.

Me interesa mantener esa flexibilidad. Es importante para desarrollar la técnica. Pero me encantaría hacer 'Manon Lescaut', 'Tosca' y 'Madama Butterfly'. Calculo que lo haré cuando haya entrado ya en los 40 años. Hay que esperar.

Ya había venido antes al Liceu pero nunca había despertado la locura que ha generado su Violetta. ¿Qué conexión hay entre usted y este personaje?

Ella es alguien con quien me puedo identificar en el descubrimiento del amor y cómo este te puede llegar a cambiar. El amor es capaz de alterar tu percepción de la vida y de lo quieres de ella. Pero el mayor cambio llega cuando lo pierdes. A mí me han ocurrido ambos. Todas las experiencias que vivimos nos cambian, evolucionamos. Por desgracia, Violetta no puede hacerlo porque la enfermedad se la lleva. Esa es la tragedia.

Entonces, ¿la verdad que transmite al interpretarla tiene mucho de usted?

Cuando la canto pienso en cosas que me han pasado porque has de poner algo de ti en los personajes. La interpretación lo abarca todo y eso es lo que quiero dar en escena porque eso lo fantástico de la ópera. Es algo que ya vi en esa 'La Bohème' que me impresionó siendo una niña.

Por más natural que parezca lo que hace en escena, no lo es.

Para nada. Es fruto de mucho trabajo, de vivir la vida, de tener muchas experiencias y de no tener miedo a mostrar algo de ello en escena. Tener miedo puede afectar tu voz y complicar tu rendimiento. Has de ir a por todas: se puede tener una hermosa voz y un alto nivel actoral.

¿Cuál es el secreto para alcanzar esa desenvoltura y seguridad en escena?

Trabajar duro y no confiarte, así de simple. Siempre estoy aprendiendo. Nunca he dejado de ver a mi profesor ni de escuchar a mis mentores. Has de ser humilde. No dar nada por sentado. Tener éxito y sentirte admirada es magnífico pero no hay que dejarse llevar por los cantos de sirena. Uno puede volverse arrogante cuando le crece el ego.

"Mi objetivo no es convertirme en una diva, sino inspirar a la gente y servir a la ópera"

¿Quién o qué le ayuda a mantener los pies en el suelo?

Mis profesores, especialmente Kamal Khan, mi 'coach' vocal desde hace 23 años. Empezamos cuando yo tenía 13 años en Florida. Ahora vive en Nueva York, como yo. Él y yo pensamos igual. Mi objetivo no es convertirme en una diva. Tampoco ser una estrella o el foco de una producción. La ópera ha de inspirar a la gente. Me convertí en cantante de ópera para servir a esta gran forma de arte, para que la ópera esté viva, brille y progrese.

Montserrat Caballé decía lo mismo.

Y tenía razón. En el momento en el que te sirves solo a ti mismo hay algo que se pierde. La ópera es mucho más grande que yo, que Caballé y que todos los grandes. Hay que tener ese sabor especial para que el público siga entusiasmándose con ella.

Los musicales también le van. Su primer disco se llama 'There's a place for us' (2018). ¿Qué significa para usted esa frase de una balada del musical 'West Side Story'?

Hice este álbum en 2017 como reacción a la elección de Donald Trump en 2016. Eran tiempos aterradores para mí y mi familia porque mis padres son emigrantes. Mi madre es portuguesa y mi padre desciende de puertorriqueños e italianos. Me asustaba el agresivo lenguaje de Trump que dividía a la gente. Ese disco es un reflejo de lo que yo siento como persona, es un reflejo de mi historia, de lo que soy. Y si elegí ese título es porque realmente creo que, como dice la canción de este musical donde se enfrentan dos bandos, los puertorriqueños y los americanos, hay un sitio para todos en este planeta. Y lo encontraremos si nos unimos y luchamos contra la violencia, la agresividad y la gente que quiere dividirnos. Hay que buscar la armonía.

Pero no se estila, sobre todo en redes sociales. Y Trump ha vuelto al poder. ¿Ha pensado en trasladarse a Europa?

Cuando algo sale mal, rendirse no es lo más acertado. Trump será como sea pero yo nunca me voy a rendir. Nunca abandonaré un país que ha alimentado mis sueños, que me ha permitido no solo estudiar ópera, sino que ha acogido a mis padres. Sin ellos, yo no existiría. ¡Hay tanta belleza en EEUU y gente tan magnífica en mi país! Personas diferentes cada uno con sus esperanzas y sus sueños. Y eso es lo importante porque Trump pasará. La norteamericanos son quienes tienen el poder más allá de cualquier presidente. Ahora toca estar más unidos y no rendirse. No le daré la espalda a mi país.

Suscríbete para seguir leyendo