Noche de apertura

Love of Lesbian cierra filas con su ‘hermandad’ en un inflamado estreno en Razzmatazz

El grupo de Sant Vicenç dels Horts abrió la gira de presentación de su álbum ‘Ejército de salvación’ con un concierto en el que contó con Rigoberta Bandini y el dúo Cala Vento como invitados sorpresa, y que puso el pórtico a las celebraciones del 25º aniversario de la sala de Poble Nou

Jordi Bianciotto

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Love of Lesbian es un grupo que va surfeando sobre la condición de artefacto pop y atracción del circuito de festivales cuando en sus canciones va ganando peso el medio tiempo y a la introspección lírica. Pero su público crece con él y atiende a su evolución, al menos ese núcleo duro que agotó el papel de sus tres conciertos de estos días: este viernes en Razzmatazz, y el sábado, noches en que la sala descorchó los fastos de su 25º aniversario (y a las que se añadió un tercer bolo que aterrizó el miércoles en Apolo).

Santi Balmes dice no sentirse de humor a estas alturas para escribir odas efervescentes al amor ‘fou’, y por eso su nuevo álbum, ‘Ejército de salvación’, gira más bien en torno a la amistad como motor existencial. Pero abrió este viernes con una canción romántica de estreno, la que da título al disco, entendiendo a la pareja, que no al ligue pasavolante, como un fiable sustento moral. Sí, oiga, nos hacemos mayores. La voz de Balmes y el teclado de Dani Ferrer abrieron ese recorrido ‘in crecendo’ de casi siete minutos, anclando la noche en una muy sentida sobriedad para empezar.

Esas cartas seguras

Los de Sant Vicenç dels Horts tocaron siete de sus once nuevas canciones, concentrando las otras seis para la segunda mitad del ‘set’. Antes, se valieron de cartas seguras para caldear la sala (notables subidones en ‘Sesenta memorias perdidas’ y ‘Bajo el volcán’) y rescataron la inhabitual ‘Wio, antenas y pijamas’. Otra repesca fue la de ‘Me amo’, que interrumpieron para oficiar un sorteo de ‘merchandising’, cuña auto-publicitaria que quebró el clima conseguido, hay que decir.

Entre el nuevo material, se eligieron algunos de los números más expeditivos, caso de ‘¿Qué vas a saber?’, de la eufórica ‘La Champions y el Mundial’ y de la mejor del ‘pack’, ‘Contradicción’, a toda mecha y que, como en el disco, Balmes compartió con esa fan desatada llamada Rigoberta Bandini. Frenética acogida de esas piezas, cantadas como si fueran clásicas. Y ya no digamos ‘La hermandad’, la que da nombre a la gira, cabalgando sobre un estribillo aparatoso pero funcional, en la estela más invasiva de Arcade Fire.

El bis trajo dianas pretéritas como ‘La niña imantada’, con extra de furia aportada por Cala Vento, y la obligada visita al ‘Club de fans de John Boy’, pero Love of Lesbian quiso ahí resaltar otras dos novedades: ‘Ya sale el sol’, purificadora y con toque de fanfarria, y la melancólica y álgida ‘El día que Starman huyó’, homenaje a David Bowie (de cuya muerte se cumplían nueve años ese 10 de enero), en el que Balmes confiesa, ay, que se siente una criatura del siglo XX. Doctor, ¿es grave?

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