Daniele Finzi Pasca, director del próximo espectáculo del Circo del Sol: "Más que sobre un funeral, 'Corteo' habla de la amistad"

El director suizo Daniele Finzi Pasca (Lugano, 1964) regresa a Barcelona en marzo con 'Corteo'. Fue su primera colaboración con el Circo del Sol en 2005 y ahora por primera vez llega a España adaptado a grandes estadios el año próximo que recalará en Barcelona a partir del 27 de marzo. Para este mago del teatro físico que también creó 'Luzia' para la factoría circense del espectáculo, 'Corteo' será siempre algo especial por ser el primero para la 'troupe' canadiense. Acostumbrado a dejar que su poesía impregne todo tipo de espectáculos, tanto con su propia compañía como en la ópera, su instinto y su pasión por la escena le mantienen con ganas de seguir sorprendiendo.

'Corteo' supuso su primera obra para el Circo del Sol, que la estrenó en su carpa en 2005.

Cuando la trabajamos en Quebec hace años ya pensé que el montaje se apreciaría mejor en un espacio de mayores dimensiones. Cuando empezamos a imaginar esta creación le dije Jean Rabasse, el escenógrafo, que me gustaría romper la lógica y la morfología de la carpa que, por un lado, tiene limitada la entrada de artistas y, por otro, no ofrece buena visibilidad a todos los espectadores.

A menudo, en los grandes espacios, los espectáculos quedan desangelados. ¿Cómo intentó evitarlo con 'Corteo', que trasladó a grandes pabellones en 2018?

Situamos a la gente muy cerca de la pista, colocada en el centro, con público a ambos lados. 'Corteo' cuenta la historia de un cortejo fúnebre donde se reúnen amigos y colegas de un payaso que se acaba de morir. Pero también se puede interpretar como un 'clown' que sueña su funeral. A diferencia de los espectáculos de circo que se hacían antes, este destacaba por tener una dimensión más teatral y nos llevó a construir una estructura que revolucionó el circo en carpa. El público se sentirá como si estuviera en un teatro donde hay un gigantesco espejo porque al otro lado del escenario también hay espectadores.

¿Cómo se consigue fundir poesía y originalidad y renovar esa esencia que está en todos sus trabajos?

Me fascinan las máquinas, el artificio, las sorpresas. Pero parte del secreto es seguir contando con un fiel equipo de colaboradores. Somos una familia que ha ido creciendo. Pero en la cocina de los espectáculos seguimos usando los perfumes y sabores que amamos. Huelen a nuestra tierra, a nuestras raíces. Pero cada vez que parece algo nuevo lo utilizo, lo incorporo.

Entonces, ¿a favor de la tecnología?

Siempre. Pero nunca ha de quedar como algo frío, sino integrarse en la propuesta. En nuestro restaurante los sabores se renuevan y siempre hay sorpresas pero los 'ñoqui' siempre sabrán a 'ñoqui', los reconoces.

Como el protagonista de 'Corteo', ¿ha diseñado su funeral?

En general, a una persona que es positiva y que se siente bien con su vida, si le preguntas cómo imagina su funeral te dirá que piensa en reunir a la familia, los amigos y los parientes. Se imagina a gente que llora y a personas que hacen un pequeño discurso... Y un ser depresivo lo que imagina es que nadie va a acudir a la ceremonia, que estará solo porque a nadie le importará su muerte. Nosotros esperamos que el público salga pensando en la felicidad que aporta el cariño y la amistad. En el fondo, más que sobre un funeral, 'Corteo' habla de ese vínculo tan especial que es la amistad.

Empezó en el circo porque era un buen atleta...

Hice gimnasia de joven, pero me di cuenta de que no tenía el perfil para llegar a alta más competición y me pasé a la acrobacia. Gracias a mi formación creé una compañía de teatro muy físico. Como ocurre en la comedia del arte y en el teatro oriental en mi compañía siempre he contado con actores que, más allá de la palabra, utilizan los gestos y el cuerpo para expresarse. Ese era mi mundo hasta que Guy Liberté y otros empezaron a llamarme interesados por mis conocimientos del gesto acrobático. Hubo un momento en el que la gente del circo entendió que se podían contar historias y para eso necesitaban una visión teatral. Esto es lo que nos ha diferenciado del circo tradicional.

La historia del Circo del Sol es increíble. ¿Quién hubiera imaginado que una compañía pequeña de teatro de calle de Quebec acabaría atrayendo a millones de espectadores y convirtiéndose en una gran marca, la mayor multinacional de circo?

Hay cosas que pasan porque un pequeño grupo de personas con una química especial y una interdependencia entre ellos se cruzan. El encuentro entre Guy Laliberté, Gilles Ste-Croix y después la llegada de otros como Franco Dragone fue eso, un grupo de gente que venía de un circo callejero con intuiciones. Se sumó la visión que tenía Guy y de la experiencia de Gilles, que descubrió el teatro más anárquico en EEUU. Esta combinación creó algo a lo que hay que sumar la historia de cuando llegaron a Los Ángeles. Un día les fue a ver un actor de cine conocido, otro Michael Jackson y ahí todo cambió. Muchas historias están hechas de una dosis de suerte, de un buen viento que te ha llevado en una dirección determinada. Pero, para responder, diría que su éxito responde a que se conjugaron dos cosas: eran un grupo de personas que compartían una amistad y unas intuiciones que eran acertadas en aquel momento.

Una curiosidad, ¿siempre ha usado sus dos apellidos Finzi y Pasca?

Siempre. Vengo de una familia que me ayudó mucho. Mi padre era fotógrafo y mi madre, una estudiosa de la literatura. Yo soy fruto de ambos, aúna la historia de los Finzi y de los Pasca. En un país como Suiza donde todavía es muy difícil que una persona pueda llevar los dos apellidos, desde pequeño yo siempre insistí en llevar ambos. Soy hijo de mi madre también ¡Quería que se supiera!. Llevar los dos apellidos permite a uno entender mejor quién es. Pero, dicho esto, no hay nadie de mi generación que hiciera lo mismo que yo.

Pues ha sido pionero de los nuevos feminismos.

Me parece fenomenal que se hable de ello y que ciertas cuestiones sean ahora parte de una reflexión. Es muy interesante, por ejemplo, que en algunas ciudades se empiecen a plantear por qué hay tantos nombres de calle de hombres y tan pocos de mujeres que, en su mayoría son de vírgenes o santas. Estas preguntas que la gente se formula responden a una lógica elemental.