Mike Flanagan y Kate Siegel, la gran 'power couple' del terror actual

Lo saben los muchos espectadores que siguieron sus miniseries para Netflix, de la magistral (lo dijo hasta Tarantino) 'La maldición de Hill House' a la reciente 'La caída de la Casa Usher': al gran auteur del terror actual Mike Flanagan, receptor de una Màquina del Temps en este festival de Sitges, le gusta contar una y otra y otra vez con los mismos actores, con gente como Henry Thomas, Carla Gugino, Katie Parker… Pero, sobre todo, con Kate Siegel, carismática presencia en nueve de sus proyectos desde 2013, cuando ejerció de villana de la alucinada película 'Oculus', y que ha llegado a ejercer como coguionista en uno de ellos, el efectivo 'slasher' entre cuatro paredes 'Hush (Silencio)', una historia de invasión doméstica sin apenas diálogo (y, en el montaje alternativo que se ha visto en Sitges, sin banda sonora).

Casados desde 2016, Flanagan & Siegel son algo así como la gran 'power couple' del terror del siglo XXI. ¿Les gusta la definición? "¡Desde luego que sí!", afirma la actriz en entrevista con EL PERIÓDICO. "Siempre hemos querido ser como Paul Newman y Joanne Woodward. Me encanta la idea de una pareja que trabaja junta. De algo así surge algo superior a la suma de sus partes". A lo que Flanagan añade, ojos casi llorosos: "Kate ha sido una compañera creativa increíble durante ya más de una década. Me ha dado forma no solo como artista, sino también como persona, claro". 

Lo único impreciso en la descripción sería, quizá, el elemento 'terror'. Nada tiene de ello su último proyecto conjunto, 'The life of Chuck', flamante Premio del Público en Toronto, distinción que suele augurar nominación al Oscar a mejor película. Es otra adaptación de Flanagan de una obra de Stephen King, la tercera tras 'El juego de Gerald' y 'Doctor Sueño', pero la novela corta en que se basa muestra al King más sentimental. La película "es una celebración de los pequeños momentos de gozo que nos encontramos en la vida, a pesar de la locura del mundo donde vivimos", cuenta Flanagan. "No es terror en absoluto. Es lo primero que he hecho que no contiene una pizca de cinismo. Quería traer una película así al mundo donde viven mis hijos". 

El hombre detrás de la obra

Pregunto a la pareja si su química (creativa) se dio rápidamente o llevó un tiempo. "Primero me enamoré de ella como actriz, cuando la vi en una obra de teatro", explica Flanagan. "Quería trabajar con Kate. Después de estar trabajando juntos, me enamoré de ella también como persona". Kate explica su lado de la historia: "Mi primer contacto con Mike fue a través del visionado de [su debut largo de 2011] 'Absentia'. Todos mis amigos la habían visto y alucinaban con ella. Yo también me obsesioné, así que cuando recibí el guion de 'Oculus', me enfoqué en estar en esa peli. Después, trabajando con Mike, descubrí que el hombre detrás de la obra era aún más interesante". 

Después de ese primer trabajo, Flanagan ha ido ofreciendo a Siegel los papeles más diversos, casi como en un desafío constante: hay todo un mundo entre la vulnerable maestra de colegio Erin Greene de 'Misa de medianoche' y la sarcástica relaciones públicas Camille L'Espanaye de 'La caída de la Casa Usher'. "Me encanta lanzarle desafíos y hacerle salir de su zona de confort", dice Flanagan. "Sabíamos que el personaje de Erin iba a suponerle un esfuerzo, dado que no suele mostrarse tan vulnerable. En cambio, Camille era un personaje hecho absolutamente a su gusto, con el que sabía que se iba a divertir y sacaría sus manos de jazz". Pero Kate quiere avisar: "Yo no trato así a mi asistente".

La venganza de Kate

En un nuevo giro de su colaboración, Flanagan ha escrito el guion del debut de Siegel como directora, un capítulo de la antología 'V/H/S/Beyond' (que mañana domingo, día 6, este par de tortolitos presentará en el Escorxador). Pero, ¿piensa la incipiente cineasta fichar a su marido como actor algún día y darle un poco de su propia medicina? "Por supuesto", dice Siegel. "De hecho, tengo toda una lista de cosas por las que quiero hacerle pasar. Voy a quemar a alguien vivo delante de él. Voy a hacer que un mono le arranque la cara… Pienso torturarle de las mejores formas posibles".