ARTISTA POLIFACÉTICO

Michael Fabiano, el tenor que deslumbra en la 'Manon' del Liceu y pilota aviones: "Cuando vuelo hallo la paz"

Más allá de la ópera el cantante trabaja en el áreas en el área empresarial y social donde destaca su fundación ArtSmart que potencia el canto en escuelas donde no se imparte música

Sierra y Fabiano, pareja de oro para ‘Manon’ en el Liceu

Michael Fabiano

Michael Fabiano / Ricard Cugat

Marta Cervera

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El tenor norteamericano Michael Fabiano es una de las estrellas de la actual temporada del Liceu. A principio de temporada cantó a Mario Cavaradossi en 'Tosca' y estos días brilla en el rol de caballero Des Grieux en 'Manon' junto a la soprano Nadine Sierra en una moderna producción de Olivier Py que estará en cartel hasta el 3 de mayo.

A sus 38 años ha desarrollado una gran carrera gracias a su talento y a su audacia que le ha llevado tanto a cantar difíciles roles muy joven como a pilotar avionetas, crear sistemas informáticos que faciliten la contratación de artistas y lanzaruna fundación para ayudar a estudiantes con pocos recursos a descubrir la música a través de un programa impartido por licenciados en canto que han acabado la carrera y no encuentran trabajo.

"Des Grieux es diferente a todos los demás personajes que he hecho. Es inocente, sano, directo y muy honesto. También sensible e introvertido. No tienen nada que ver con Rodolfo, de 'La bohème'. Ni con Alfredo, de 'La traviata'. A Des Grieux no le van las fiestas y, aunque hay momentos en los que enloquece, es un hombre más bien introvertido. Es todo lo contrario que yo, que soy un tipo muy abierto y estrovertido", dice Fabiano hablando en un español bastante correcto. Seguro que lo mejorará muy pronto porque se ha instalado en Madrid para tener una base en Europa. "Tengo muchos contratos en España y es un país que siento cercano donde hay una buena calidad de vida y el coste es inferior en comparación a otros países".

'Manon' de Jules Massenet llega al Liceu

Michael Fabiano y Nadine Sierra, en un momento de 'Manon'. / Manu Mitru

"¿Sabes el talento que tienes? Nunca habrá un cantante que pueda cantar igual que tú. Has de estudiar música, me dijo Gerorge Shirley""

A diferencia de otros cantantes, él nunca soñó con hacer carrera en la lírica. Sabía lo duro que era por una tía suya. Sin embargo, todo cambió cuando en la Universidad de Michigan conoció a Georges Shirley, el primer tenor negro que cantó en el Metropolitan de Nueva York en 1961. "Me apunté a clases de canto porque siempre me había gustado la música sin intención da nada. Si canto es porque él me dijo muy serio: ¿Sabes el talento que tienes? Nunca habrá un cantante que pueda cantar igual que tú. Tienes la obligación de compartir ese talento. Has de estudiar música". Nunca se ha arrepentido de seguir su consejo. Tres años después se graduó y un año después ganó el concurso del Metropolitan, la Ópera de Nueva York. Fue el primero de muchos reconocimientos.

Si Fabiano que ha llegado muy alto a sus 38 años es en parte porque pese a escuchar a muchos maestros ha diseñado su carrera fiándose de su instinto. "Cada persona tiene una voz diferente. Lo que le sirve a una persona no le funciona igual a otra. Uno debe descubrir qué le va mejor". Por eso recomienda no seguir ciegamente a nadie. "Cada cantante debe hallar su propio camino. Al final eres tú quien ha de crear su propio método teniendo siempre muy en cuenta dos cosas, la mente y el corazón".

"Cada cantante debe hallar su propio camino porque cada voz es diferente"

Empezó cantando roles muy líricos pero a los 32 años estrenó 'Don Carlo'. Fue atrevido, pero se preparó a fondo y le salió bien. Desde hace un tiempo se está centrado en roles más dramáticos. En 10 años ¿Dónde se ve? "Habré cantado 'Otello' y mucho Verdi y Puccini que aun no he hecho. Pero hay otras cosas en mis planes al margen de mi carrera operística porque me siento muy unido a mi país. Mi fundación ArtSmart ayuda a más o menos a 1000 niños a quienes damos lecciones de canto en escuelas donde no se enseña música. Estamos en nueve ciudades. Y hay más proyectos que quiero poner en marcha en los próximos tres años, ya los explicaré cuando llegue el momento".

Más allá de la ópera

Al hablar con él uno tiene la sensación que su mente no para. Hace 10 años puso en marcha una aplicación para ayudar a encontrar trabajo a los artistas con rapidez. "Era una especie de Uber para poner en contacto a cantantes con ofertas de trabajo, para cuando cancelaba un cantante, por ejemplo, poder contratar a otro con rapidez sin necesidad de intermediarios. Invertí mucho dinero en ese proyecto pero no salió bien". Pero no se desanimó. "Aquel fracaso me mostró el camino a seguir. Primero, necesitaba un sistema integral y, segundo, tener socios". Ahora, cuando visto con perspectiva, comenta: "Yo era entonces muy joven y aquello fue una locura porque lo hice todo solo. Durante cuatro años no pude descansar bien. Trabajaba 20 horas cada día, tenía mi carrera, mi fundación y no ganaba dinero. Cero". En lugar de entrar en una depresión, Fabiano, siguió luchando.

"Durante cuatro años no pude descansar bien. Trabajaba 20 horas cada día, tenía mi carrera, mi fundación y no ganaba dinero. Cero"

En lugar de acudir al psicoanalista, el tenor se relaja pilotando avionetas, sobre todo cuando está en EEUU, donde reside más de la mitad del año. "Cuando vuelo hallo la paz. Al frente de los mandos solo puedo pensar en lo que hago en aquel momento. En esa soledad, en el aire, concentrado en pilotar me sienta fenomenal".

Aunque le quedan muchos grandes roles que debutar, el tenor prepara también el estreno de un ciclo de canciones que está escribiendo Jimmy Bellido que estrenará el año próximo. "No hay muchos nuevos compositores que me gusten", confiesa. Y está horrorizado con algunas campañas en redes sociales de su país predicando la necesidad de potenciar compositores de cambio, de enterrar a los clásicos y dar cancha a gente nueva. "Me da miedo que se abra la puerta a gente sin experiencia. ¿Por qué hemos de dejar de escuchar obras de Verdi y Puccini ? No se puede cancelar la cultura de esta manera como algunos pretenden. El público no es tonto. Si sigue escuchando sus obras es por algo: saben apreciar la calidad.  "