Opinión | Periféricos y consumibles

Javier García Rodríguez

Javier García Rodríguez

Escritor y profesor de Literatura Comparada en la Universidad de Oviedo

'Exitismo' y exotismo: cerrado por reinvención, por Javier García Rodríguez

cerrado

cerrado

Fermín de la Calle entrevista al futbolista Borja Iglesias en 'El Periódico de España'. Al parecer, este jugador bético es una' rara avis' de la Liga. Y no solo por lo de sus uñas pintadas de negro. Le pregunta el periodista por el "exitismo" que ha colonizado a la sociedad actual, y el lector académico y reglamentista que vive dentro de mí asoma la patita por debajo de la puerta y se pone de uñas ante lo que supongo errata, error o neologismo innecesario. Pero no, el error es mío (una vez más). Repaso el Diccionario de la Lengua Española, versión en línea, y me confirma que en Argentina, Bolivia, Chile y Uruguay significa "afán desmedido de éxito". Americanismo, pues. Como los que van llegando del mundo del fútbol: canchero, pasto, penal, arquero, patear, o definir (creado por César Luis Menotti cuando era entrenador del F. C. Barcelona).

Del exotismo de un jugador poco previsible, al exitismo como lacra social. Menos mal que acude en mi defensa Georgina Rodríguez para afirmar con desparpajo: "ni Cristiano ni yo somos materialistas" en la presentación de la segunda temporada de su 'docureality' 'Soy Georgina'. No explica la 'influencer si se refiere al materialismo filosófico, dialéctico, cultural o filosófico. Pero bueno.

Con menos glamur que el de Cristiano y Georgina, Pablo García Casado, en su poema 'Césped artificial', publicado en el último número de 'Anáfora', la revista literaria que dirigen en Oviedo Pablo Núñez y Candela de las Heras, recuerda la figura del Tato Abadía, aquel futbolista del Logroñés con las medias caídas, la alopecia por bandera, y el pundonor, ay el pundonor, como táctica. El poema de García Casado va del pasado al presente, del campo de fútbol a la tienda de quesos que regenta ahora el Tato en Logroño. Y de ahí al yo poético que sigue, contra todo pronóstico y cada vez en peores condiciones físicas, asistiendo al partido semanal con sus amigos.

Ni futbolista, ni exitista, ni materialista, pero sí sabinista es otro periodista, Jesús Fernández Úbeda, que afirma en 'Zenda': "Comparte Sabina con Lope, Lorca y Leonard Cohen ese duende que, maridando rigor literario y cultura popular, entronca con el tuétano basal del alma, o como se llame, del 'Homo sapiens'".

Anda cada cual reinventándose. Borja Iglesias en la selección española. Georgina en su casoplón y a mí plin. García Casado en su futbito semanal y poético. Sabina, cambiando de músicos y quedándose tan pancho. El futbolista, el exitista, el materialista, el sabinista y, si me apuran, hasta el 'tamanista' bailando la yenka. Pasando de Marx a Gyneth Paltrow, a quien un denunciante le reclama 300.000 dólares por un accidente de esquí que le dejó como secuelas "cuatro costillas rotas, depresión y pérdida del disfrute de la vida". ¡Siuuuuuuuuuuu!

Suscríbete para seguir leyendo