'Los pacientes del doctor García' se estrena en el Festival de Málaga con Almudena Grandes en el recuerdo

‘Los pacientes del doctor García’ es la cuarta de las novelas que Almudena Grandes dedicó a ese gran fresco histórico de cómo las vidas pequeñas se adaptaron o fueron trituradas por el franquismo. ‘Los pacientes…” también está impulsada, mucho más que el resto de la serie, 'Episodios de una guerra interminable', por un argumento de ‘thriller’, de novela de espías, con una intriga internacional que se desarrolla entre España, Alemania y Argentina al hilo de la huida, acabada la Segunda Guerra Mundial, de muchos excapitostes nazis que recalaron en Madrid camino a a Sudamérica con el implícito apoyo de Franco. Presentada en el Festival de Cine de Málaga, con la presencia de Mauro, uno de los tres hijos de Almudena Grandes, entre el público, se trata de una ambiciosa producción de RTVE, la productora Diagonal y DAPlaneta, bajo el paraguas de Netflix que la presentará -al mismo tiempo que TVE- en su plataforma el próximo mes de abril. “Me gusta mucho esta adaptación y me ha sorprendido lo bien que casan los actores con la imagen de los personajes que yo tenía en mente”, asegura el hijo complacido.

Presente en la preproducción

Fallecida en noviembre del 2021, a Almudena todavía le dio tiempo a involucrarse en el guion y dar el visto bueno a la elección de los actores. De hecho, es la primera serie televisiva basada en una obra de Grandes, que ya había visto cómo se convertían en películas novelas como ‘Malena es un nombre de tango’, ‘Los aires difíciles’, ‘Atlas de geografía humana’ o ‘Castillos de arena’.

La serie, dirigida por Joan Noguera, recrea a la perfección con ayuda de efectos digitales el Madrid sitiado de 1937 y se inicia siguiendo las andanzas de un doctor republicano, Guillermo García (Javier Rey), que trabaja en un hospital donde van a parar los heridos de la contienda. Dos personajes más se cruzan en su camino: Amparo Priego, chica bien de derechas, coqueta y caprichosa (Verónica Echegui) y un personaje crucial, Manuel Arroyo (Tamar Novas), diplomático republicano que, como un James Bond de la época, lucha por desarticular la red de evasión de criminales de guerra nazis. Todo ello en un arco de tiempo que abarca desde la guerra civil hasta la muerte del dictador en 1975.

 “Si esto se ha convertido en una serie es porque la acción transcurre a lo largo de 40 años y necesitábamos tiempo y espacios para recrear las vidas de estos personajes”, asegura la productora Elena Bort de DAPlaneta.  “Los actores nos hemos enfrentado a cuatro o cinco horas de maquillaje y prótesis para rejuvenecer y envejecernos. Esas horas hay que sumarlas a la interpretación, pero pese a eso hemos trabajamos bastante cómodos, aunque haya sido costoso”, explica Javier Rey, que junto a Echegui y Novas se encuentra de promoción en Málaga.

La vida en momentos extremos

Rey admira de su personaje la capacidad de reaccionar cuando los acontecimientos que te rodean son extremos: “Todos podemos jugar a imaginar cómo nos comportaríamos, pero la realidad es que posiblemente seríamos muy cobardes frente a la muerte. Al final, lo que me gusta de mi personaje es que intenta hacer las cosas bien desde su sabiduría como médico, intentando salvar a la gente al margen de su ideología política”. Echegui se confiesa muy lejos de su caprichosa falangista:  “Solo me identifico con su carácter juguetón. Pero he intentado comprenderla, muy posiblemente es así porque ha sido malcriada, pero por encima de todo intento no juzgarla”.

En cuanto a Novas, se muestra encantado con su papel de espía que le permite desarrollar mil identidades y especialmente agradecido por haber podido recuperar aspectos desconocidos de la historia de España y sus perdedores: “Mi ilusión era tener una oportunidad para poder cenar una noche con Almudena y darle las gracias por enseñarme la historia de mi país desde lo más íntimo. Hay gente que tarda en reconocer a sus hijos predilectos, pero su mediocridad quedará a la vista con el paso del tiempo”.