Galardón de Focus y Comanegra

Lluís-Anton Baulenas gana el primer premio Santa Eulàlia de novela sobre Barcelona

'Seré el teu mirall', novela del autor de Sant Andreu, retrata la ciudad postolímpica del Fòrum de les Cultures y dispara contra la especulación inmobiliaria

Baulenas

Baulenas / Elisenda Pons

Elena Hevia

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Barcelona como generadora de ficciones es el objetivo del nuevo premio de novela Santa Eulàlia –por aquello de que fue la antigua y para algunos verdadera patrona de la ciudad-, impulsado por la editorial Comanegra y la plataforma cultural Àfora vinculada al grupo Focus, con la muy respetable dotación de 25.000 euros. En la primera convocatoria, que se ha hecho pública este lunes en una gala celebrada en el Teatre Romea, ha resultado ganadora la novela ‘Seré el teu mirall’ de un viejo conocido de las ficciones barcelonesas como Lluís-Anton Baulenas (Barcelona, 1958), aunque el ADN del escritor informe de su origen como uno de esos chicos de Sant Andreu, para quienes salir del barrio siempre ha significado “ir a Barcelona”. “Yo observo Barcelona con amor, claro está, pero también con una distancia que no tendría un barcelonés de pura cepa”, precisa.

Baulenas, un autor que escribió “obras de teatro muy narrativas” y sigue escribiendo novelas de carácter teatral que se han llevado al cine –como ‘Amor idiota, de Ventura Pons-, sabe bien lo que significan los galardones.  Ha tenido un buen puñado. Ahí están, entre otros el Ramon Llull, el Serra d’Or, el Prudenci Bertrana y el Sant Jordi, pero no son los premios la piedra de toque de sus creaciones. “Mi madre, una mujer de extracción popular que ha trabajado desde los 12 años,  tiene ahora 91 años y ya no ve. Hasta hace muy poco yo le daba a leer mis novelas y sabía que podían funcionar si las entendía”, explica el autor visiblemente emocionado mientras la voz se le quiebra.

Eterno dinero negro

‘Seré el teu mirall’, que estará en las librerías el próximo 1 de marzo, se sitúa en la Barcelona del Fòrum de les Cultures, cuando la ciudad está a punto de despedirse definitivamente de los grandes acontecimientos que marcaron su última transformación olímpica. Al mismo tiempo que  la burbuja inmobiliaria empieza a hincharse sin que nadie se atreva a aventurar cuáles serán sus límites, dos personajes entrecruzan sus historias en ese paisaje barcelonés: el protagonista que trabaja en una inmobiliaria impulsada por el dinero negro –“algo que no es que haya ocurrido en el 2003, sino que ha sucedido siempre”, remacha el autor- y un arquitecto millonario que se siente responsable del 'arquitecturicidio' que supuso para el Eixample barcelonés la construcción de las lamentables 'remuntes', el levantar uno o más pisos sobre edificios nobles de la ciudad, en ocasiones sobre edificios modernistas, impulsadas en el pasado por las malas artes del alcalde Porcioles.

Para Baulenas, ese momento del que puede escribir ahora porque tiene ya suficiente distancia temporal para hacerlo, no está cargado de una especial nostalgia, tan solo es un eslabón más de todas las ficciones que puede generar una ciudad con más de 2.000 años de historia, algo a lo que no pueden aspirar París o Madrid y que siempre ha “admirado” al autor. “Barcelona es una ciudad especial capaz de generar discusiones sobre las cosas más peregrinas como el modelo de ciudad que queremos, la continuación de las obras de la Sagrada Família o si, muerto Copito de Nieve, deberíamos disecar al animal o no”. De hecho, el desencadenante confeso de 'Seré el teu mirall' fue para Baulenas el recuerdo de un hombre adulto llorando a mares por la muerte del gorila albino.