Literatura y canciones
De Brassens a vàlius: la pasión musical de Josep Maria Espinàs
El escritor barcelonés fue una figura fundamental en el nacimiento de la Nova Cançó y acabó siendo homenajeado (sin ironía) por un grupo de 'indie-punk'
Espinàs en la tele: entrevistar como si no pasara nada
MULTIMEDIA | Josep Maria Espinàs, la vida desde una columna

Josep Maria Espinàs, guitarra en mano, en un concierto de Els Setze Jutges, junto a Francesc Pi de la Serra.
En una de las últimas columnas que escribió para EL PERIÓDICO (‘Un no a la trascendencia’, publicada el 5 de octubre de 2019), Josep Maria Espinàs relataba que su falta de competencia para manejar las nuevas tecnologías le impedía escuchar las canciones de Georges Brassens, lo que le provocaba, admitía, un sentimiento de añoranza “que viene de muy lejos y que nunca podré borrar”. “Afortunadamente conservo las letras y recuerdo las músicas, y así puedo renovar mi admiración”, añadía el escritor barcelonés, fallecido el pasado domingo a los 95 años .
Con su deslumbrante capacidad para rehuir la trascendencia “y crear sencillas y palpitantes escenas de vida”, Brassens se convirtió en la segunda mitad de los años 50 en el primer amor musical serio de Espinàs, que vio en el cantautor de Sète un modelo viable para impulsar en Catalunya una nueva canción que interpelara con sentido crítico a la sociedad de su tiempo sin renunciar a la luz y a la alegría. “Oblidem velles cançons / que encomanen la tristesa. / Encetem la nova veu / i alegrem l’antiga terra”, cantaba Espinàs en 1962 en su composición ‘A la vora de la nit’. Ese mismo año, el escritor publicó su primer disco, ‘Espinàs canta Brassens’, un epé con cinco adaptaciones al catalán de otras tantas canciones del trovador de la mala reputación.
'Chanson' y acción cultural
La influencia de Brassens, y de la ‘chanson’ francesa en general, fue determinante en el nacimiento de Els Setze Jutges, colectivo fundado en 1961 por Espinàs (que fue quien le puso nombre), Miquel Porter i Moix y Remei Margarit con el propósito de impulsar y normalizar el uso del catalán a través de las canciones contemporáneas. En los años siguientes, el grupo se fue ampliando con la llegada de cantantes y músicos profesionales (Francesc Pi de la Serra, Enric Barbat, Guillermina Motta, Joan Manuel Serrat, Maria del Mar Bonet, Lluís Llach…), y Espinàs, movido por la convicción de que el tiempo del amateurismo había quedado atrás, dio un paso al lado y abandonó los escenarios.
En su corta pero muy influyente trayectoria musical, el escritor publicó discos de versiones, de composiciones propias (‘Espinàs canta les seves cançons’, 1963) y de canciones tradicionales (‘Cançons tradicionals catalanes’, 1962); también compuso para otros artistas, como Guillermina Motta y Joan Isaac, grabó piezas infantiles (recopiladas muchos años después por la editorial La Campana en el librodisco ‘Les 26 cançons infantils’) y colaboró con Xavier Montsalvatge en la narración para niños ‘Viatge a la Lluna’, de 1969. Asimismo, junto al empresario y promotor cultural Ermengol Passola, participó en la fundación del sello discográfico Concèntric y en la apertura de la sala de conciertos La Cova del Drac, donde las actuaciones de los integrantes de la emergente Nova Cançó se alternaban con espectáculos teatrales y veladas literarias. Con el tiempo, y ya con otros propietarios, el local orientó su programación hacia el jazz, otra de las grandes pasiones musicales de Espinàs.
"He estat a tot arreu"
A partir de los años 70, y con la notabilísima salvedad de la composición de la letra del ‘Cant del Barça’ en 1974, el escritor y periodista barcelonés se mantuvo apartado de la actividad musical. Pero la música no se olvidó de él. Las menciones y reconocimientos podían llegar de los lugares más inesperados, como cuando en 2014 el dúo barcelonés de ‘cançó-punk’ vàlius incluyó en su segundo elepé, ‘Fam’, una versión en catalán del clásico ‘I’ve been everywhere’ (composición del australiano Geoff Mack popularizada por Johnny Cash) y rebautizó la canción como… ‘Espinàs’.
Noticias relacionadasAlertado de la existencia de la canción por su editora Isabel Martí, Espinàs acudió a una actuación de vàlius en la Festa Major de Sarrià y al acabar, visiblemente complacido por el homenaje, estuvo un rato departiendo con los miembros del grupo, Gerard Segura y Pol Serrahima. No solo eso. Una semana después, glosó el concierto y el encuentro en su columna diaria en EL PERIÓDICO, en un artículo titulado ‘La plaza de Sarrià’ en el que establecía un vínculo entre las canciones de vàlius y los inicios de la Nova Cançó.
En la primavera de 2021, la canción de vàlius dedicada al escritor adquirió una enorme popularidad al aparecer como sintonía de un anuncio de cerveza Xibeca. Espinàs estaba, ciertamente, en todas partes.
¿Ya eres usuario registrado? Inicia sesión
Este es un contenido especial para la comunidad de lectores de El Periódico.Para disfrutar de estos contenidos gratis debes navegar registrado.
- Previsión meteorológica La predicción de Roberto Brasero para Semana Santa: anuncia una “doble buena noticia”
- Sanidad Pública Aviso de la Seguridad Social a los padres con hijos menores de 26 años: situación a tener en cuenta
- Trámites de divorcio Hiba Abouk confirma su separación de Achraf Hakimi y apoya a la joven presuntamente violada: "Siempre estaré al lado de las víctimas"
- Predicción Sucederá este jueves: la Aemet lanza un aviso especial a estas zonas de España
- Predicción ¿Cuándo lloverá? La Aemet abre la puerta a la esperanza
- Tras la muerte de Aless BOMBAZO | Ana Obregón, madre de una niña a los 68 años por gestación subrogada
- Selección española Rodri: "No empecemos con las dudas, por favor"
- Primera plana de la edición impresa La portada de EL PERIÓDICO del 29 de marzo de 2023
- Detención de Ponsatí Confrontación, ¿pero con quién?
- Tribuna ¿Ponsatí debía ser detenida?