Conciertos de la Mercè

Marcel i Júlia, pop contra la emergencia climática en Bogatell

El dúo desplegó su propuesta mestiza, de temática sentimental y ecologista, en la segunda noche del escenario ‘Mediterràniament’

BARCELONA. 24.09.2022 Musica Merce BAM. Concierto de Marcel i Julia en la platja de Bogatell. FOTO FERRAN SENDRA

BARCELONA. 24.09.2022 Musica Merce BAM. Concierto de Marcel i Julia en la platja de Bogatell. FOTO FERRAN SENDRA / FERRAN SENDRA

Jordi Bianciotto

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Amor y sostenibilidad climática son los grandes temas de Marcel i Júlia, dúo que riega sus canciones con metáforas naturalistas, como en la que abrió su pase de este sábado en Bogatell, en los conciertos de la Mercè, ‘Millor amb tu’: “Ara que la Terra és un hostatge / que no hi ha sorra a la platja (…) / Ara, que el mar és massa dolç / i que a l’amor li falta sal”, cantó esta pareja que decidió emprender su andadura musical después de darse un garbeo por Brasil en bicicleta.

Ellos son Marcel Lázara (que fue guitarrista-cantante de Txarango) y Júlia Arrey, tándem que cruzó sus voces, arropado por cinco músicos, en el arranque de la segunda noche de ‘Mediterràniament’, cartel completado con los pases de Els Catarres y Delafé y las Flores Azules. El amago de lluvia y el fuerte viento que arreciaba junto al mar pusieron un plus de furioso realismo romántico a ese repertorio entregado a los elementos: el de ‘En órbita’ (2021), su segundo disco, inspirado en la foto titulada ‘Salida de la Tierra’, que el astronauta William Anders captó de nuestro planeta desde la Luna en 1968.

La Tierra no está tan mal

Lo de Marcel i Júlia es menos aparatoso que la turbo-verbena de Txarango, y tiende hacia un pop mestizo con ocasionales tramas tropicales-jamaicanas y diálogos guitarreros ‘afro’, propenso al baile, pero sin sobreactuación. Despuntaron temas como ‘Amor climàtic’, el exponente más meridiano de su universo lírico, con citas a volcanes, osos polares y “coralls en perill d’extinció”, y ‘Sabor mestizo’, del primer álbum, pieza portadora de apetito vital: “quiero comerme el mundo y me lo comeré contigo”.

Mucho estribillo de acceso inmediato, aderezado con proclamas para ver el vaso medio lleno. “Per vosaltres, per la vida i perquè la Terra és un bon lloc per viure”, celebró Marcel, estirando su vocabulario cósmico, mientras que Júlia procedió a dar un coscorrón a los políticos “perquè apostin per les persones”, e insistió, invocando a Torras i Bages: “el futur serà sostenible o no serà”.

Marcel i Júlia comenzaron el bolo ante un público todavía un poco diezmado y terminaron ante una bulliciosa multitud que cantó con ellos, asistida por una ración extra de bombo a cargo de ella, su hito definitivo, ‘Per la vida’. Puro desahogo pospandémico para “brindar per les coses senzilles” y bailar “quan brillen els estels”.